Alexander Smallens (1889-1972) fue un director de orquesta y compositor de origen ruso que se destacó por su trabajo en el teatro musical y la ópera. Nacido en San Petersburgo, emigró a los Estados Unidos en 1910 y comenzó su carrera como violinista en una orquesta teatral. Pronto se convirtió en director musical de varias compañías de ópera y teatro, incluyendo el Metropolitan Opera y la Opera de Chicago.
Smallens fue un defensor de la música contemporánea, dirigiendo el estreno de varias obras importantes del siglo XX, como "Wozzeck" de Alban Berg, "Mavra" de Igor Stravinsky y "Porgy and Bess" de George Gershwin. También compuso música para varias producciones teatrales, incluyendo "The Dybbuk" y "The Caucasian Chalk Circle". Durante la Segunda Guerra Mundial, Smallens sirvió como oficial de inteligencia en el Ejército de los Estados Unidos.
Smallens murió en 1972 en Nueva York, dejando un legado impresionante de música y cultura. Su trabajo como director de orquesta y compositor ha sido reconocido por su innovación y compromiso con la música contemporánea, dejando una huella única e importante en la historia de la música teatral y operística del siglo XX.
Marc Blitzstein y Alexander Smallens tuvieron una relación profesional bastante estrecha durante la década de 1930 y 1940. Ambos eran músicos y trabajaron juntos en varias obras de teatro musical y óperas.
Blitzstein y Smallens se conocieron en 1934, cuando Smallens dirigió la producción de la ópera de Blitzstein "The Cradle Will Rock". Esta experiencia los llevó a trabajar juntos en varias producciones más, incluyendo "I Married an Angel", "The Threepenny Opera" y "Regina".
En 1946, Blitzstein y Smallens trabajaron juntos en una producción de "The Cradle Will Rock" en la Ciudad de Nueva York. Blitzstein también confió en Smallens para dirigir varias producciones de su obra maestra "Regina", basada en la obra "The Little Foxes" de Lillian Hellman.
Además, Smallens también fue el director musical de la Ópera Metropolitana de Nueva York durante gran parte de las décadas de 1930 y 1940, y colaboró con muchos otros compositores y artistas notables durante su carrera.
En resumen, Blitzstein y Smallens mantuvieron una fructífera relación profesional durante varias décadas, colaborando en varias obras exitosas y consagradas en la historia del teatro musical y la ópera.