Amber Norman es una mujer enigmática que siempre ha sido muy independiente y confiada en sí misma. Le encanta viajar y explorar nuevos lugares, pero su mayor pasión es la fotografía. Ha trabajado como fotógrafa profesional durante más de 20 años y tiene un ojo para la belleza en los detalles más simples.
Aunque su trabajo la ha llevado por todo el mundo, Amber siempre ha mantenido una relación estrecha con su familia y amigos. Es una persona muy leal y protectora de aquellos que ama.
En su tiempo libre, Amber disfruta de la meditación y el yoga, lo que la ayuda a mantenerse tranquila y centrada en momentos de estrés. También es una apasionada de la lectura y siempre tiene una pila de libros en su mesita de noche.
Aunque es una persona muy reservada en cuanto a su vida personal, se sabe que Amber es una defensora de los derechos humanos y participa activamente en organizaciones benéficas y comunitarias. Su espíritu libre y generoso la convierten en una persona inspiradora para todos aquellos que la conocen.
Amber-Norman es una nadadora sudafricana y ex modelo que estuvo relacionada sentimentalmente con el príncipe Alberto II de Mónaco. La relación comenzó en 2000, cuando Amber-Norman era una de las participantes del equipo sudafricano de natación en los Juegos Olímpicos de Sydney.
En aquel entonces, el príncipe Alberto estaba presente en los Juegos representando al Comité Olímpico Internacional y conoció a Amber-Norman. La pareja comenzó a salir y fue vista en varios eventos públicos juntos.
Sin embargo, la relación no duró mucho y la pareja se separó en 2001. Posteriormente, el príncipe Alberto se casó con la ex nadadora olímpica sudafricana Charlene Wittstock en 2011 y tienen dos hijos juntos.
Por su parte, Amber-Norman se retiró de la natación y se convirtió en modelo y presentadora de televisión. Ha llevado una vida discreta lejos de los medios de comunicación.
Nicole Coste y Amber Norman se conocieron en una conferencia de negocios en París. Ambas estaban interesadas en ampliar sus redes de contactos y afianzar alianzas estratégicas para sus respectivas empresas. Después de varios días de conversaciones y reuniones, descubrieron que tenían mucho en común y decidieron continuar su relación profesional. Con el tiempo, la confianza mutua y la admiración que se tenían llevó a que se convirtieran en grandes amigas, compartiendo sus intereses personales y disfrutando de su tiempo libre juntas. Hoy en día, Nicole y Amber son consideradas un gran ejemplo de amistad entre mujeres líderes en el mundo de los negocios.