Anne Lefevre era una mujer francesa nacida en el siglo XVI que se convirtió en la primera mujer en obtener un título universitario en Europa. Fue la hija del humanista y teólogo francés Jacobus Faber Stapulensis y también recibió una educación humanista de su padre. A la edad de 15 años, se casó con un abogado llamado Guillaume Lefevre con quien tuvo seis hijos, pero después de su muerte, se dedicó a la educación de sus hijos y a sus estudios. En 1600, Lefevre se matriculó en la Universidad de París y obtuvo un doctorado en Filosofía y Teología. Su logro de graduarse en la universidad, la convirtió en una de las primeras mujeres en recibir educación formal en Europa y abrió el camino para otras mujeres en la educación superior. Después de su graduación, Lefevre se convirtió en una figura destacada en los círculos intelectuales franceses y también participó en debates teológicos y religiosos. Lefevre escribió y publicó varios artículos y ensayos sobre temas religiosos y se desempeñó como tutora y mentora de jóvenes estudiantes. Anne Lefevre también participó activamente en la Reforma Protestante y fue una partidaria del Calvismo. Durante su vida, fue criticada y atacada por su género y su creencia religiosa, pero ella siguió defendiendo sus ideas y luchando por la igualdad de género en la educación y la religión. Lefevre pasó sus últimos años en Ginebra, donde continuó escribiendo y enseñando hasta su muerte en 1633. Su legado incluye no solo su logro académico sino también su lucha por la igualdad de género y la libertad religiosa en Francia.