Aristotle Onassis fue un empresario griego nacido en 1906 en la isla de Smirna, actual Turquía. Comenzó su carrera en el mundo de los negocios de la mano de su padre, quien se dedicaba a la importación de tabaco. Tras la muerte de éste, Onassis se trasladó a Buenos Aires, donde se inició en la industria naviera y logró hacer fortuna durante la Segunda Guerra Mundial gracias a su capacidad para sortear las restricciones y aprovechar las oportunidades que se presentaban.
En la década de 1950, Onassis se convirtió en uno de los hombres más ricos del mundo gracias a su flota de barcos petroleros y a su participación en la construcción del canal de Suez. Su fama se disparó gracias a sus relaciones con importantes personalidades, como Jacqueline Kennedy, quien se convirtió en su segunda esposa tras la muerte del presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy.
Onassis falleció en 1975 a causa de una embolia pulmonar, dejando una gran fortuna y un legado como uno de los hombres más influyentes del siglo XX en el mundo de los negocios y la política internacional.
Aristotle Onassis y Pamela Harriman tuvieron una relación amorosa en la década de 1960. Onassis era un magnate griego del transporte marítimo y había estado previamente casado con la hija del presidente de Estados Unidos, Jacqueline Kennedy, mientras que Harriman era una viuda adinerada y socialité estadounidense.
La pareja se conoció en la Costa Azul francesa y comenzó a tener una relación romántica mientras estaban casados con otras personas. Harriman se divorció de su segundo esposo para estar con Onassis, pero finalmente su relación terminó cuando Onassis decidió casarse con la viuda del presidente argentino, Maria Callas.
Sin embargo, la relación entre Onassis y Harriman tuvo un impacto duradero en su vida profesional. Harriman se convirtió en embajadora de Estados Unidos en Francia en la década de 1990 y utilizó su influencia para ayudar a la carrera política de Bill Clinton. Mientras tanto, Onassis continuó expandiendo su imperio empresarial y se convirtió en una figura legendaria en el mundo de los negocios.
La relación entre Aristotle Onassis y Jacqueline Kennedy comenzó en 1963, después de la muerte del presidente John F. Kennedy. Aristotle Onassis era un hombre de negocios griego muy conocido y rico, mientras que Jacqueline Kennedy era la viuda del presidente Kennedy.
Onassis y Jacqueline se conocieron en el verano de 1963 en la isla de Scorpios en Grecia donde ella había ido a pasar unas vacaciones junto a su hermana. La pareja comenzó a pasar tiempo juntos y se rumoreaba que estaban saliendo en secreto, siendo fotografiados juntos en diferentes ocasiones.
En 1968, la pareja se casó en una ceremonia privada en Skorpios, donde Onassis tenía su lujosa residencia. La boda fue una gran sensación en todo el mundo porque todo el mundo quería saber todo lo que estuviera relacionado con la viuda de Kennedy.
Aristotle Onassis y Jacqueline Kennedy vivieron juntos en un estilo de vida de lujo y jet-set que se convirtió en un tema de conversación para muchos en todo el mundo. Vivieron en diferentes lugares, incluyendo Skorpios, Grecia, y después en una mansión en París y un yate que se convirtió en un símbolo de su vida juntos.
La relación entre Onassis y Jacqueline Kennedy terminó cuando Aristotle Onassis murió en 1975. Jacqueline Kennedy fue su viuda hasta su propia muerte en 1994, pero nunca volvió a casarse después de su matrimonio con Onassis.
En resumen, la relación entre Aristotle Onassis y Jacqueline Kennedy fue una historia apasionante y romántica que fascinó a millones y que aún hoy es recordada como uno de los grandes temas de conversación en toda la comunidad internacional.
Aristóteles Onassis y Lee Radziwill mantuvieron una relación sentimental durante varios años durante la década de 1960. Onassis, un magnate del transporte marítimo griego, se había casado con la legendaria viuda Jacqueline Kennedy, quien era la hermana menor de Radziwill, en 1968. Sin embargo, su relación con Radziwill había comenzado antes de su matrimonio con Kennedy.
Radziwill, una famosa socialité y diseñadora de interiores estadounidense, conoció a Onassis en Grecia en 1962. En ese momento, ella estaba casada con el príncipe polaco Stanislaus Radziwill, pero se estaba separando de él. Onassis se enamoró de Lee y comenzó a cortejarla. Ella estaba cautivada por su grandeza y su estilo de vida lujoso, y la pareja empezó a salir.
Onassis y Radziwill tenían mucho en común. Ambos eran adinerados, amantes del glamur y del estilo de vida de jet-set. Viajaban por todo el mundo en sus lujosos yates y automóviles deportivos. Sin embargo, la relación no llegó a buen puerto debido a la ambición de Onassis.
En 1963, Onassis compró un pequeño islote griego llamado Skorpios. Lo convirtió en su residencia de verano y en su refugio privado para escapar de la prensa. Radziwill también empezó a pasar tiempo en Skorpios, pero empezó a sentir que Onassis era más posesivo de lo que ella quería.
El matrimonio de Onassis con Jacqueline Kennedy fue una sorpresa para Radziwill. La relación entre ella y su hermana se tensó después de que Jacqueline se enterara de la relación entre su marido y su hermana. Radziwill y Onassis se mantuvieron en contacto durante algunos años más, pero nunca volvieron a tener una relación romántica.
Onassis murió en 1975, y Radziwill siguió viviendo una vida de jet-set hasta su muerte en 2019. Aunque su relación con Onassis fue breve y tumultuosa, dejó una huella duradera en la cultura popular.
Aristotle Onassis y Maria Callas tuvieron una relación tumultuosa que duró más de una década. El magnate griego y la cantante de ópera se conocieron a principios de la década de 1950, cuando Onassis estaba casado con su primera esposa, Athina Livanos. Sin embargo, esto no impidió que Onassis y Callas comenzaran una aventura amorosa larga y complicada.
Onassis y Callas viajaban juntos por todo el mundo a bordo de su famoso yate, el Christina O. Aunque la relación convirtió a Callas en una de las mujeres más famosas del mundo, también la dejó en una posición vulnerable; para Onassis, su relación siempre fue secundaria a su ambición empresarial.
La relación se tambaleó después de que Onassis se casó con Jacqueline Kennedy en 1968. Callas se sintió traicionada y abandonada, y la pareja se separó. Callas murió en 1977, mientras que Onassis falleció en 1975. La relación todavía se considera una de las más famosas e infames de la historia moderna.
La relación entre el magnate griego Aristóteles Onassis y la actriz sueca Greta Garbo fue breve pero apasionada. Se cree que se conocieron a principios de la década de 1960 en el yate de Onassis, el Christina O. Garbo se encontraba en una travesía por el Mediterráneo cuando fue invitada a bordo del yate de Onassis.
Desde entonces, la actriz y el empresario comenzaron una relación tumultuosa, llena de altibajos y rumores. Onassis estaba casado en ese momento con Athina Livanos, hija del industrial naviero Stavros Livanos, con quien tenía dos hijos. Garbo había abandonado su carrera cinematográfica en 1941 y llevaba una vida muy privada en Nueva York.
La relación entre Onassis y Garbo se mantuvo en secreto por un tiempo, pero pronto se supo que estaban juntos. Garbo viajó con Onassis en su yate y pasó tiempo en su isla privada Skorpios en Grecia. Se dijo que Onassis intentó hacer que Garbo volviera al cine, pero ella rechazó todas las ofertas.
A pesar de que la relación entre Onassis y Garbo no duró mucho, se ha convertido en una de las más famosas de la historia de Hollywood. La actriz y el empresario se separaron en 1968, cuando Onassis se casó con Jacqueline Kennedy, viuda del presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy. Garbo murió en 1990 y Onassis en 1975.
Aristotle Onassis y Athina Livanos fueron dos importantes figuras en la sociedad y la historia de Grecia. Onassis nació en 1906 en Esmirna, Turquía, y se convirtió en uno de los hombres más ricos y poderosos del mundo gracias a sus negocios en el transporte marítimo y la industria petrolera. Livanos, por su parte, era la hija del magnate del transporte marítimo Stavros Livanos y la multimillonaria Athina Onassis Roussel.
Aristotle Onassis y Athina Livanos se conocieron en la década de 1940 y se casaron en 1946 en una ceremonia espectacular en la Isla de Skorpios, propiedad de Onassis. La pareja tuvo dos hijos, Alexander y Christina, pero su matrimonio estuvo plagado de infidelidades, relaciones tumultuosas y problemas financieros.
En 1968, Athina Livanos solicitó el divorcio de Aristotle Onassis después de enterarse de su aventura con la viuda de John F. Kennedy, Jacqueline Kennedy. El divorcio de la pareja fue ampliamente cubierto por los medios de comunicación y fue uno de los más costosos de la historia, ya que Livanos recibió una gran parte de la fortuna de Onassis, incluyendo la famosa isla de Skorpios.
Tras el divorcio, Onassis se casó con Jacqueline Kennedy en 1968, pero su matrimonio fue breve debido a la muerte de Onassis en 1975. Athina Livanos, por su parte, se volvió a casar y vivió el resto de su vida lejos de los reflectores hasta su muerte en 1974.
En resumen, la relación entre Aristotle Onassis y Athina Livanos fue tumultuosa y marcada por infidelidades y problemas financieros. A pesar de haber sido una de las parejas más poderosas y ricas del mundo, su matrimonio no pudo resistir las presiones y la atención mediática.
Aristóteles Onassis y Gloria Swanson tuvieron una relación romántica breve pero intensa en los años 50.
Onassis, un multimillonario armador griego, conoció a Swanson, una famosa actriz estadounidense, en París en 1954. Se dice que quedó cautivado por su belleza y personalidad extravagante.
La pareja se veía regularmente en París y Onassis también invitaba a Swanson a pasear en su yate privado. Sin embargo, la relación se vio obstaculizada por la insistencia de Onassis de mantener relaciones abiertas y la negativa de Swanson a aceptar tal estilo de vida.
El romance terminó en 1957 cuando Onassis conoció a la legendaria viuda Jacqueline Kennedy y decidió centrar su atención en ella.
A pesar de la brevedad de su relación, Swanson y Onassis mantuvieron una amistad cercana hasta la muerte de Onassis en 1975. Swanson siempre lo recordó con cariño como un hombre fascinante y único en su vida.
La relación entre Aristotle Onassis y Eva Perón fue breve pero intensa. Se conocieron en 1953 en una fiesta en Buenos Aires organizada por Francisco Franco, dictador de España en ese momento. Onassis quedó impresionado por la belleza y la personalidad de Evita, y comenzó a invitarla a sus yates y fiestas en Europa.
Se cree que Onassis le ofreció a Evita una gran cantidad de dinero para que se divorciara de Juan Perón y se casara con él. Sin embargo, Evita rechazó la oferta y decidió quedarse comprometida con su esposo y su trabajo político en Argentina.
Onassis, por su parte, continuó construyendo su negocio naviero y expandió su fortuna. Después de la muerte de Evita en 1952, Onassis se dedicó a la actriz griega Maria Callas y luego se casó con Jacqueline Kennedy, esposa del presidente de Estados Unidos John F. Kennedy.
A pesar de su breve relación, la presencia de Evita en la vida de Onassis fue significativa tanto en su vida personal como en su carrera empresarial. Su encanto y poder como figura publica en Argentina atrajeron la atención de Onassis y lo ayudaron a establecer relaciones y conexiones en el mundo político sudamericano.
Aristotle Onassis y Simone Simon tuvieron una breve pero intensa relación en la década de 1950. Onassis era conocido como un magnate industrial y naviero griego, mientras que Simon era una famosa actriz francesa.
Onassis conoció a Simon en Monte Carlo durante uno de sus viajes de negocios. La química entre ellos fue instantánea y comenzaron una relación apasionada. Sin embargo, a pesar de los grandes gestos románticos de Onassis, como regalarle un yate, Simon no estaba dispuesta a abandonar su carrera por él.
La relación terminó abruptamente cuando Onassis se enamoró de otra actriz, María Callas. Simon quedó devastada y se mantuvo alejada de los medios durante varios años.
Después de su relación con Simon, Onassis siguió haciendo grandes negocios y se convirtió en uno de los hombres más ricos del mundo. Sin embargo, nunca olvidó a Simone Simon y, según se dice, la recordaba con cariño en sus últimos años de vida.
Aristóteles Onassis fue un magnate de los negocios y armador griego que se convirtió en uno de los hombres más ricos del mundo en la década de 1950 y 1960. Veronica Lake, por otro lado, fue una famosa actriz estadounidense de cine que se hizo famosa por su distintivo peinado con una media melena que cubría uno de sus ojos.
La relación entre ambos comenzó en la década de 1950, cuando Onassis conoció a Lake en una fiesta en Hollywood. La actriz estaba pasando por un mal momento en su carrera, y el griego se sintió atraído por ella. La pareja comenzó una relación amorosa, que fue seguida de cerca por los medios de comunicación de la época.
Sin embargo, la relación fue turbulenta, con altibajos y conflictos, en gran parte debido a la naturaleza errática de Onassis y su estilo de vida extravagante. También había rumores de que el magnate había tenido otras relaciones mientras estaba con Lake.
A pesar de todo, la pareja se mantuvo en contacto durante muchos años después de su ruptura, y Onassis continuó enviando regalos a la actriz durante muchos años después de su separación. Veronica Lake murió en 1973 debido a problemas de salud relacionados con el alcoholismo, mientras que Aristóteles Onassis falleció en 1975 debido a un fallo cardíaco.
Aristotle Onassis y Dolores del Río tuvieron una breve relación amorosa a principios de la década de 1950. El famoso empresario griego conoció a la actriz mexicana en una fiesta en Hollywood y quedó impresionado por su belleza y elegancia.
A pesar de que Onassis estaba casado con Athina Livanos en ese momento, comenzó a cortejar a Del Río y la llevó de vacaciones a diferentes lugares del mundo, incluyendo el Caribe y Monte Carlo.
Sin embargo, la relación terminó abruptamente cuando Onassis decidió dejar a Del Río por su exesposa, con quien finalmente se reconcilió. A pesar de todo, los dos mantuvieron una amistad cercana hasta la muerte de Onassis en 1975.
Dolores del Río se convirtió en una de las estrellas del cine latinoamericano más importantes de su época, protagonizando películas como "La Malquerida" y "Doña Bárbara". También fue una activista y defensora de los derechos de las mujeres y los derechos civiles. Murió en 1983 a la edad de 77 años.
Aristóteles Onassis y Jeanne-Marie Rhinelander mantuvieron una relación amorosa que fue objeto de controversia y escándalo en su época. Onassis, uno de los hombres más ricos del mundo en aquel momento, conoció a Jeanne-Marie Rhinelander, heredera de una de las familias más ricas de Nueva York, en un viaje en barco en 1946.
A pesar de la diferencia de edad y de la desaprobación de la familia de Rhinelander, Onassis y Jeanne-Marie comenzaron una relación que duró varios años. Sin embargo, en 1958, Onassis decidió romper la relación para casarse con Jacqueline Kennedy, la viuda del presidente estadounidense John F. Kennedy.
Aunque Jeanne-Marie Rhinelander nunca habló públicamente sobre su relación con Onassis, se cree que él le ayudó económicamente después de su ruptura. Rhinelander murió en 2003 a la edad de 87 años, sin haberse casado ni tener hijos. Por su parte, Aristóteles Onassis falleció en 1975.