No se dispone de información suficiente sobre la vida de Arthur Fuller para proporcionar un resumen detallado de la misma.
Un día, Cynda y Arthur se encontraron en una tienda de comestibles en el centro de la ciudad. Cynda estaba examinando las frutas, tratando de elegir lo mejor para su cena esa noche. Arthur, que estaba detrás de ella en la línea del cajero, notó que Cynda estaba teniendo dificultades para decidir qué llevar. Entonces, ofreció su ayuda.
Cynda, sorprendida y agradecida por esta amable oferta, comenzó a hablar con él. Descubrieron que vivían en el mismo barrio y que asistieron a la misma universidad. Arthur era un maestro de escuela primaria y Cynda trabajaba en marketing. Se rieron, charlaron sobre la vida y descubrieron que tenían mucho en común. Intercambiaron números de teléfono y se despidieron.
Después de esa noche, empezaron a salir, viéndose cada vez más. Descubrieron que se complementaban mutuamente en muchas maneras: siempre que uno necesitaba un hombro para llorar, el otro estaba allí para brindar consuelo. A medida que pasaba el tiempo, se enamoraron profundamente el uno del otro, el tipo de amor que crece y se fortalece con el tiempo. Ahora, se han casado y viven juntos como marido y mujer, agradecidos por el día aquel en la tienda de comestibles que les hizo encontrarse.