Baron Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza nació en La Haya, Países Bajos en 1921, hijo de un magnate industrial alemán y de una aristócrata húngara. En 1961, se convirtió en el jefe de la familia Thyssen-Bornemisza y en uno de los hombres más ricos del mundo.
Su pasión por el arte le llevó a coleccionar una de las mayores colecciones privadas del mundo, con más de 1500 obras de arte, entre ellas obras maestras de grandes artistas como Durero, Holbein, Tiziano, Van Gogh, entre otros.
En 1961, compró Villa Favorita, una impresionante mansión en Lugano, Suiza, que se convirtió en el hogar de su colección y abrió al público en 1988 como el Museo Thyssen-Bornemisza.
En 1985, se casó con la modelo brasileña Carmen Cervera y juntos formaron una de las parejas más glamurosas de la época.
Baron Thyssen-Bornemisza falleció en 2002 en su casa de Lugano, Suiza, dejando una gran herencia a su esposa y a sus hijos. Su legado sigue vivo gracias a su extensa colección de arte que sigue siendo una de las mayores del mundo y es accesible al público en el Museo Thyssen-Bornemisza en Madrid.
Carmen Cervera y el barón Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza tuvieron una relación amorosa que comenzó a finales de los años 70 y se prolongó durante una década. Cervera, anteriormente conocida como Miss España 1961, fue la tercera esposa del barón, con quien se casó en 1985.
Durante el tiempo en que estuvieron juntos, la pareja compartió una gran pasión por el arte y comenzaron a coleccionar obras de arte juntos. En 1988, la colección Thyssen-Bornemisza fue trasladada desde Suiza a España y se exhibió en el Palacio de Villahermosa en Madrid. Carmen Cervera ayudó a supervisar la instalación de la colección en el museo y ha sido una defensora activa de la misma desde entonces.
Tras la muerte del barón en 2002, Cervera heredó gran parte de su colección de arte, incluyendo obras de maestros como Monet, Renoir y Van Gogh. La baronesa Thyssen-Bornemisza ha continuado prestando obras de la colección a museos de todo el mundo.
La relación entre Carmen Cervera y el barón Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza fue controvertida debido a su diferencia de edad y a los rumores de que ella había sido la amante del padre del barón, Heinrich Thyssen. Sin embargo, la pareja se mantuvo junta y su colaboración en la creación y promoción de la colección Thyssen-Bornemisza se ha convertido en un legado duradero.
La relación entre Baron Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza y Liane Denise Shorto fue una de las más controvertidas en la alta sociedad europea de la década de 1980. Thyssen-Bornemisza, un empresario y coleccionista de arte alemán, se casó con la modelo española Carmen Cervera en 1985. Sin embargo, al mismo tiempo que estaba casado con Cervera, también mantuvo una relación con Shorto, una socialité británica.
La relación entre Thyssen-Bornemisza y Shorto se hizo pública en 1987, cuando fueron fotografiados juntos en la ciudad suiza de St. Moritz. Aunque Thyssen-Bornemisza negó inicialmente cualquier relación con Shorto, más tarde admitió estar enamorado de ella. La situación se volvió aún más complicada cuando Shorto quedó embarazada y dio a luz a un hijo, Borja, en 1988.
La relación entre Thyssen-Bornemisza y Shorto fue amarga y tumultuosa. Cervera, la esposa oficial de Thyssen-Bornemisza, se sintió humillada y traicionada, y exigió el divorcio. Los medios de comunicación se hicieron eco de la historia y la pareja se convirtió en el centro de atención de los tabloides europeos durante varios años.
Después de varios años de relaciones tensas y constantes rumores de infidelidad, Thyssen-Bornemisza y Cervera finalmente se divorciaron en 1993. Thyssen-Bornemisza continuó manteniendo una relación con Shorto y su hijo, y se casó con ella en 1995. La pareja permaneció casada hasta la muerte de Thyssen-Bornemisza en 2002.
A lo largo de su relación, Thyssen-Bornemisza y Shorto enfrentaron numerosas criticas y escándalos. Sin embargo, también disfrutaron de una vida de lujo y glamour, rodeados de las figuras más prominentes de la alta sociedad europea. El nacimiento de Borja también abrió una brecha en el mundo del arte, ya que Thyssen-Bornemisza decidió añadir a su colección obras de artistas contemporáneos para mostrar a su hijo una visión moderna del arte.
Baron Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza y Fiona Campbell Walters fueron una pareja durante varios años.
Thyssen-Bornemisza fue uno de los hombres más ricos de Europa debido a la herencia de su familia y su imperio industrial. Walters fue una modelo británica que se hizo famosa por su belleza y su estilo elegante.
La pareja se conoció en 1988 en un evento social en Londres y comenzaron una relación que duraría hasta la muerte de Thyssen-Bornemisza en 2002. Durante su relación, vivieron entre Lugano, el sur de Francia y Madrid, donde tenían una impresionante colección de arte.
Walters se convirtió en una persona clave en la vida de Thyssen-Bornemisza y le ayudó a administrar su patrimonio después de que él se retirara de los negocios. También fue una gran entusiasta del arte y trabajó en la gestión y la organización de las exposiciones de la colección Thyssen-Bornemisza.
Después de la muerte de Thyssen-Bornemisza, Walters heredó gran parte de su fortuna, así como la propiedad de la colección de arte.
Aunque la relación entre Baron Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza y Fiona Campbell Walters no estuvo libre de controversias debido a la diferencia de edad y las críticas de la familia de Thyssen-Bornemisza, fue muy importante para ambos y dejó una huella en el mundo del arte.
Baron Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza fue un empresario y coleccionista de arte alemán que poseía una gran fortuna y una de las colecciones de arte más importantes del mundo. En 1954, se casó con la modelo y actriz británica Nina Sheila Dyer, convirtiéndose en su tercera esposa. La pareja tuvo dos hijos juntos, Francesca y Lorne.
El matrimonio de Hans y Nina duró 23 años, durante los cuales vivieron en varios lugares del mundo, incluyendo Suiza, España y los Estados Unidos. Durante este tiempo, Hans siguió construyendo su colección de arte y, en 1985, creó la Fundación Thyssen-Bornemisza para compartir su colección con el público.
A pesar de que Hans y Nina se divorciaron en 1976, mantuvieron una buena relación y ella continuó siendo una presencia en la vida de la familia Thyssen. Nina falleció en 2013, a la edad de 78 años. La pareja sigue siendo recordada como una de las parejas más glamorosas y enigmáticas del siglo XX.
Baron Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza fue un magnate alemán de negocios y coleccionista de arte, considerado uno de los mayores coleccionistas privados del siglo XX. En 1956, se casó con la princesa Teresa de Lippe-Weissenfeld, una noble alemana de origen polaco.
La pareja tuvo tres hijos: Francesca, Georg y Lorne. Sin embargo, en 1982, la pareja se divorció y la princesa Teresa se mudó a Chile. A pesar de su separación, continuaron compartiendo la pasión por el arte y la colección, y el barón Heinrich Thyssen-Bornemisza creó su famosa colección de arte, a menudo llamada la Colección Thyssen-Bornemisza, gracias a su colaboración con su ex esposa, la princesa Teresa.
La colección incluye obras maestras de artistas como Van Gogh, Degas, Caravaggio, Munch, Hopper y Renoir, entre otros. La mayoría de las obras se exhiben en el Museo Thyssen-Bornemisza en Madrid, España, que fue inaugurado en 1992 después de varios años de planificación y restauración.
A pesar de su divorcio, el barón Heinrich Thyssen-Bornemisza continuó manteniendo una estrecha relación con su ex esposa y sus hijos, y la princesa Teresa visitaba regularmente la colección y el museo. La princesa Teresa murió en 2008 a la edad de 80 años, pero su legado y contribución a la colección de arte continúa siendo apreciado y recordado.