Belisa Ribeiro es la protagonista de la novela "La mujer del juez" de Isabel Allende. Nació en una aldea remota de Sudamérica y creció en una familia pobre. Aprendió a leer y escribir con su padre, quien era un maestro itinerante, y se convirtió en una experta en el lenguaje y las palabras. A los 14 años, fue vendida a un hombre mayor en un matrimonio arreglado y tuvo que abandonar su educación.
Después de sufrir abuso y maltrato por parte de su esposo, Belisa decide huir y se convierte en una vendedora ambulante de palabras. Con su habilidad única para encontrar las palabras correctas para satisfacer los deseos de sus clientes, se convierte en una figura legendaria en los pueblos del campo.
Un día, es contratada por el juez de un pueblo para escribir discursos y cartas políticas. A medida que trabaja para el juez, se enamora de él y juntos luchan contra la corrupción en la región. Al final, Belisa logra encontrar la felicidad y el amor que había estado buscando durante tanto tiempo.
Belisa-Ribeiro y Marcos-Paulo se conocieron en una de las playas más hermosas de Brasil. Belisa estaba disfrutando del sol y la arena mientras leía su libro favorito y Marcos, quien estaba probando su nueva cámara, capturó sin querer una fotografía de Belisa. Ella al darse cuenta de que la habían fotografiado, se acercó a Marcos para preguntarle sobre la foto y de ahí comenzaron a charlar. Descubrieron que compartían muchos intereses en común, como la fotografía y los viajes. Desde ese día, empezaron a salir y se convirtieron en grandes amigos. Poco a poco, su relación se fue fortaleciendo y ahora son una de las parejas más felices y aventureras que existen.