Berkun Oya

Berkun Oya es un dramaturgo, guionista y director turco nacido en 1977 en Ankara. Creció en Estambul, donde estudió cine y literatura en la Universidad de Bogaziçi. Tras graduarse, empezó a trabajar como guionista para televisión y cine, y en 2003 escribió su primera obra de teatro: “Körlük” o “La Ceguera”.

A través de sus trabajos, Berkun Oya explora temas como la identidad, la memoria, la política y la sexualidad. Algunas de sus obras más conocidas incluyen “Zengin Mutfağı” o “La Cocina de los Ricos”, sobre una familia adinerada que se enfrenta a sus problemas internos, y “İz” o “La Huella”, sobre un hombre que descubre oscuros secretos de su familia.

También ha trabajado como director y guionista para diversas series de televisión y películas, como “Kiralık Aşk” o “Amor Alquilado” y “Masum” o “Inocente”, ambas disponibles en Netflix.

Conocido por su estilo provocador y polémico, Berkun Oya ha recibido varios premios a lo largo de su carrera, incluyendo el prestigioso premio Sait Faik de literatura en 2009 por su libro de cuentos “Karanlıkta Dans” o “Bailando en la Oscuridad”. Actualmente dirige y escribe para la serie “Aynen Aynen”, disponible en la plataforma turca de streaming BluTV.

Relaciones amorosas

Nehir Erdogan

Novia de Berkun Oya

2012 - 2013

Berkun y Nehir se conocieron en una librería mientras buscaban un mismo libro. Al final, resultó que solo quedaba una copia disponible. Ambos se acercaron al mismo estante al mismo tiempo y, al ver que estaban buscando lo mismo, comenzaron a hablar. Descubrieron que compartían muchos intereses y comenzaron a salir regularmente. Con el tiempo, su relación se fortaleció y se convirtieron en una pareja inseparable.

Sebnem Dönmez

Novia de Berkun Oya

2009 - 2011

Berkun-oya y Sebnem-donmez se conocieron en una cafetería de Estambul. Mientras ambos esperaban su pedido, sus ojos se encontraron y hubo una chispa. Finalmente, Berkun-oya se acercó a Sebnem-donmez y le preguntó sobre el libro que estaba leyendo. A partir de ahí, entablaron una conversación tan fluida que parecía que se conocían desde hacía mucho tiempo. Después de intercambiar números de teléfono, se fueron, pero Berkun-oya no podía dejar de pensar en ella así que volvió a la cafetería para invitarla a salir. El resto es historia: se enamoraron y se convirtieron en inseparables compañeros.