Caco Ricci es reconocido como uno de los chefs más innovadores y creativos del mundo gastronómico. Su estilo único y atrevido, combinado con una técnica impecable, lo ha llevado a ganar diversos premios y ser invitado a participar en numerosos programas de televisión.
Además de ser un chef destacado, Caco es conocido por su gran pasión por el arte. Tiene una impresionante colección de obras de artistas contemporáneos y siempre está buscando nuevas formas de conectar la gastronomía con el arte.
Aunque ha alcanzado el éxito a nivel internacional, Caco sigue siendo una persona humilde y cercana a su equipo de trabajo. Siempre está dispuesto a compartir su conocimiento y motivar a otros chefs jóvenes a seguir sus sueños.
En su tiempo libre, disfruta de la lectura de novelas de misterio y la práctica de deportes extremos como el paracaidismo y el snowboarding. También es un ávido viajero y ha visitado muchos países de todo el mundo en busca de inspiración para su cocina y su arte.
Caco y Ricci eran dos amigos inseparables que compartían todo, incluso un pequeño taller mecánico donde reparaban motocicletas antiguas. Un día, mientras trabajaban en una vieja Harley-Davidson, escucharon música alta proveniente de un taller cercano. Curiosos, se acercaron y conocieron a Andressa y Suita, dos amigas brasileñas que se habían mudado recientemente al barrio y que también tenían un taller mecánico. A pesar de las diferencias culturales y lingüísticas, rápidamente se hicieron amigos y comenzaron a trabajar juntos, ayudándose mutuamente en sus proyectos y compartiendo su pasión por las motocicletas. Con el tiempo, Caco y Ricci se dieron cuenta de que se habían enamorado de las chicas brasileñas, y comenzaron a cortejarlas con regalos y salidas. Andressa y Suita, que también sentían atracción por los dos amigos argentinos, aceptaron sus avances y comenzaron una relación amorosa que duraría muchos años. Juntos, construyeron una gran amistad y forjaron un fuerte vínculo que les permitió superar todas las adversidades y desafíos que se les presentaron.
Caco-ricci y Luana-piovani se conocieron en una fiesta en la casa de unos amigos en común. Al principio, no se hablaban mucho, pero después de un par de tragos, empezaron a conversar animadamente. Descubrieron que compartían una pasión por la música y empezaron a intercambiar recomendaciones de bandas y canciones. En un momento, Caco-ricci se animó a mostrarle a Luana-piovani una canción que había escrito y tocó una pequeña parte en la guitarra. A Luana-piovani le encantó y ambos se dieron cuenta de que tenían una gran conexión musical. De ahí en adelante, empezaron a verse regularmente para tocar juntos y en poco tiempo formaron una banda. Y así, gracias a su amor por la música, Caco-ricci y Luana-piovani se convirtieron en amigos y compañeros de banda inseparables.
Caco-ricci y Tanara-ruppenthal se conocieron en una feria de artesanías en el sur de Brasil. Ambos estaban buscando materiales para sus proyectos de arte y casualmente se encontraron en la misma tienda. Tanara, que estaba buscando telas para sus pinturas, se acercó a Caco, que estaba examinando algunos esmaltes para cerámica, y le preguntó sobre su trabajo. Caco se sorprendió por su interés y comenzó a hablarle sobre su pasión por las artes y la cerámica en particular. A partir de allí, comenzaron a intercambiar ideas sobre arte y descubrieron que tenían una gran afinidad creativa. Después de charlar durante un rato, decidieron intercambiar información de contacto y seguir en contacto para compartir más ideas y colaborar en proyectos futuros. Desde entonces, han trabajado juntos en varios proyectos y se han convertido en grandes amigos.