Catherine II de Rusia, conocida como Catherine the Great, nació en Prusia en 1729 con el nombre de Sophia Augusta Fredericka. Se casó con el heredero del trono ruso, el futuro zar Pedro III, en 1745 y se convirtió en la emperatriz de Rusia en 1762 tras liderar un golpe de estado en contra de su esposo. Catherine the Great fue una líder ilustrada que implementó reformas y modernizó la economía, educación y cultura de Rusia. También expandió el territorio del imperio al anexar Crimea y gran parte de Polonia. Durante su mandato, Catherine mantuvo relaciones culturales y políticas con otros líderes europeos, como Voltaire y Napoleón Bonaparte. Bajo su gobierno, se creó el primer teatro nacional ruso y una colección de arte con más de 4.000 pinturas, que hoy en día forma parte del Museo del Hermitage en San Petersburgo. Catherine también fue conocida por sus numerosos amantes, incluyendo a Grigory Potemkin, uno de sus consejeros más cercanos y comandante militar. Falleció en 1796 y su hijo Pablo le sucedió como emperador de Rusia. Catherine the Great es considerada como una de las figuras más influyentes de la historia de Rusia y una de las líderes femeninas más destacadas del siglo XVIII.