Charlie Hamblett nació en Inglaterra y desde niño mostró una gran pasión por la música, especialmente por el blues y el rock. A los 16 años, formó su primera banda y comenzó a tocar en pubs y bares locales.
En 2012, lanzó su primer álbum como solista, "The Bittersweet". Este disco llamó la atención de la industria musical y, poco después, Hamblett fue contactado por la famosa banda de trance Above & Beyond para colaborar en su álbum "We Are All We Need".
A partir de entonces, Hamblett comenzó a viajar por todo el mundo, presentándose en grandes festivales y conciertos junto a Above & Beyond y otros artistas de fama mundial.
En 2018, lanzó su segundo álbum como solista, "Wandering Mind", que fue bien recibido por público y crítica. En este trabajo, Hamblett se dedicó a explorar nuevas mezclas de géneros y sonidos.
En su carrera, Charlie Hamblett ha trabajado con algunos de los mejores artistas de la música electrónica, incluyendo a Armin van Buuren, Ferry Corsten y Markus Schulz. Su talento y pasión por la música lo mantienen como uno de los artistas más interesantes y prometedores en la escena actual.
Daisy Ridley y Charlie Hamblett se conocieron en un bar de Londres. Era una noche de invierno y habían quedado con sus respectivos amigos en el mismo lugar. Durante la velada, se encontraron varias veces y hubo una chispa que surgió entre ellos, aunque en ese momento no se dieron cuenta.
Fue hasta el final de la noche, cuando todos estaban por irse a sus respectivos hogares, que Charlie tomó la iniciativa de acercarse a Daisy. La invitó a tomar un trago y charlar un poco más. Fue así como se dieron cuenta de que tenían muchas cosas en común, desde gustos musicales hasta aficiones en el deporte.
Se separaron esa noche, pero quedaron en volver a verse pronto. Desde entonces empezaron a salir juntos, a conocerse mejor y a enamorarse. Con el tiempo, se convirtieron en inseparables y decidieron dar un paso más en su relación: mudarse juntos a un departamento en el centro de Londres.
Esa noche en el bar fue el inicio de una gran historia de amor que aún continúa. Daisy y Charlie agradecen haberse encontrado esa noche en el bar, pues ese encuentro cambió sus vidas para siempre.