Christodoulos Hatzipetros nació en 1979 en Grecia y desde joven se interesó por la tecnología. Comenzó a estudiar ingeniería eléctrica en la Universidad Nacional Técnica de Atenas, pero luego decidió dedicarse completamente a la informática.
En 2001, fundó su primera empresa de tecnología, Exit Technologies, que se centró en la venta de computadoras y accesorios en línea. En 2004, fundó otra empresa llamada Incrediblue que ofrece servicios de alquiler de yates en línea.
En 2013, Hatzipetros fundó su tercera empresa, Blueground, que se concentra en el alquiler de apartamentos amueblados en grandes ciudades internacionales. La empresa se centró originalmente en alquilar apartamentos amueblados a través de plataformas de alojamiento temporal de corto plazo, pero con el tiempo se convirtió en una empresa independiente que ofrece alquileres a largo plazo.
Christodoulos Hatzipetros es reconocido por su capacidad de innovación y su creatividad en el mundo empresarial. Su éxito se debe a su visión de negocios y su capacidad para crear soluciones innovadoras en el campo de la tecnología y el turismo.
Christodoulos Hatzipetros fue un aristócrata y político griego del siglo XIX, mientras que Jane Digby fue una famosa aventurera y aristócrata británica que vivió en la misma época. La relación entre ambos comenzó cuando Digby viajó a Grecia en 1840, donde conoció a Hatzipetros en Atenas.
Se sabe que Digby quedó fascinada con la cultura griega y la belleza del joven Hatzipetros, quien era conocido por su inteligencia y su habilidad con las armas. Al poco tiempo, la pareja se enamoró profundamente y comenzó una relación que duró varios años.
Sin embargo, la relación entre Hatzipetros y Digby no fue fácil. La aristócrata británica estaba casada en ese momento con su tercer esposo, pero esto no impidió que mantuviera una relación con Hatzipetros, quien también estaba casado.
La pareja vivió juntos en Grecia durante varios años, pero finalmente Hatzipetros tuvo que abandonar el país debido a su implicación en un complot político. Digby, quien no quería separarse de su amante, decidió abandonar a su esposo y seguir a Hatzipetros a Munich, donde vivieron juntos durante un tiempo.
Después de varios años juntos, la relación entre Hatzipetros y Digby se deterioró y finalmente terminó. Hatzipetros regresó a Grecia y se casó con otra mujer, mientras que Digby continuó viajando y viviendo aventuras alrededor del mundo. A pesar de la ruptura, la relación entre ambos quedó plasmada en la historia como una de las más apasionadas e intensas de la época.