Claudio Dabed es un escritor y cineasta argentino, nacido en 1970 en la ciudad de Buenos Aires. Estudió cine en la Universidad del Cine y en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA).
En su carrera literaria, Dabed ha publicado varias novelas, entre ellas "La casa sin abuela", "El jardín secreto de Ofelia" y "Los espejos del sol". También ha escrito guiones para cine y televisión, incluyendo la serie "La caída".
Como cineasta, ha dirigido varias películas, entre ellas "Una novia errante" en 2007, que ganó varios premios en festivales internacionales de cine como el Festival de Cine de San Sebastián y el Festival de Cine de La Habana. También dirigió el documental "El chofer y la señora Lynch" en 2013.
Además de su trabajo creativo, Dabed también ha sido profesor de guion en la Universidad del Cine y en la Universidad de Buenos Aires.
Claudio Dabed y Melissa George fueron una vez pareja. Dabed es un director de cine y televisión chileno, mientras que George es una actriz australiana.
La pareja se conoció en el set de la película "Mulholland Drive" de David Lynch en el año 2000, en la que George interpretó a la amante de Dabed en la pantalla grande. Luego comenzaron una relación que duró varios años y se casaron en 2000.
Sin embargo, la pareja se separó en 2011 después de 11 años juntos y una hija en común. La separación no fue amistosa, y se produjo una batalla judicial por la custodia de su hija llamada Sol.
A pesar de la difícil separación, ambos han seguido adelante con sus carreras. Dabed ha seguido dirigiendo películas y series de televisión, mientras que George ha aparecido en varias producciones tanto en Australia como en Estados Unidos, incluyendo "The Good Wife", "Grey's Anatomy" y "Hunted".
Un día, Claudio y Titi se encontraron en una tienda de música en el centro de la ciudad. Ambos estaban buscando un álbum de un artista desconocido para compartir con sus amigos en una fiesta esa noche. Cuando se dieron cuenta de que estaban buscando lo mismo, empezaron a hablar sobre la música en general y descubrieron que compartían el mismo amor por el jazz y el rock clásico. La conversación fluyó tan bien que decidieron ir juntos a la fiesta y tocar algunas canciones en vivo. Desde ese día, Claudio y Titi se convirtieron en grandes amigos y compañeros de banda, y han estado tocando juntos en muchos eventos y conciertos desde entonces.