Constance Collier fue una actriz británica nacida en 1878 y fallecida en 1955. Comenzó su carrera en el teatro a finales del siglo XIX y se convirtió en una actriz de renombre en Londres. En 1905, debutó en Broadway, y en 1915, hizo su primera aparición en el cine en la película "The Vanishing Lady". A lo largo de su carrera, Collier trabajó en muchas producciones de teatro, cine y televisión. Se hizo famosa por su papel de la Reina Bruja en la película "The Thief of Bagdad" en 1924 y recibió una nominación al Oscar por su interpretación en "Stage Door" en 1937. Tuvo una carrera muy activa hasta su muerte en 1955. Además de actriz, Collier también fue autora y escribió varios libros, incluyendo su autobiografía "Harps and Harpists" en 1952. También era conocida por su estilo dramático y exagerado, así como por su elegancia y estilo en la moda. Su legado como una de las grandes actrices teatrales del siglo XX continúa siendo recordado en la actualidad.