David Adler (1882-1949) fue un arquitecto estadounidense conocido por sus diseños de casas residenciales. Nació en Milwaukee, Wisconsin, y creció en una familia de clase media alta con una gran pasión por el arte y la cultura.
Estudió arquitectura en la Universidad de Pennsylvania y luego trabajó en la oficina del famoso arquitecto Frank Lloyd Wright en Chicago. En 1909, abrió su propia firma de arquitectura en Chicago, donde se especializó en diseñar casas residenciales para clientes adinerados.
El estilo de Adler combinaba el clasicismo europeo con elementos modernos y naturales, creando un estilo elegante y atractivo. También utilizó materiales de alta calidad, como piedra y madera, para crear estructuras duraderas y atractivas.
Adler se convirtió en uno de los arquitectos más solicitados de Chicago en la década de 1920, y su trabajo se extendió por todo el país. Diseñó la casa del actor y comediante Harold Lloyd en Beverly Hills, California, y también trabajó en muchos proyectos comerciales y gubernamentales.
Durante la Gran Depresión, Adler se especializó en la remodelación de casas existentes en lugar de diseñar nuevas construcciones. Después de la Segunda Guerra Mundial, trabajó en varios proyectos de vivienda pública en Chicago.
Adler murió en 1949 por complicaciones de un derrame cerebral. Aunque solo vivió hasta los 67 años, su legado perdura en su trabajo arquitectónico, que todavía es apreciado por su belleza y elegancia en todo el mundo.
David y Jessica se conocieron en un evento de caridad para recaudar fondos para la conservación de animales salvajes en el Parque Nacional de Yellowstone. Ambos estaban trabajando como voluntarios y se encontraron en la mesa de registro. Jessica notó que David estaba nervioso y le ofreció una sonrisa reconfortante y una charla amistosa. David se sintió a gusto de inmediato y comenzaron a hablar sobre sus intereses, descubriendo que compartían la pasión por la fotografía y el senderismo. Durante todo el evento, estuvieron juntos, explorando el parque y tomando fotografías de la vida silvestre. Al final de la noche, intercambiaron números y comenzaron a planear su próxima aventura juntos. Desde entonces, David y Jessica han sido una pareja feliz y aventurera, viajando por todo el mundo para explorar la naturaleza y disfrutar la vida juntos.