Dede Wilsey es una socialité y filántropa estadounidense nacida en 1944 en San Francisco. Está casada en segundas nupcias con el empresario Al Wilsey y es madre de tres hijos. Fue presidenta del San Francisco Fine Arts Museum durante más de una década y ha estado involucrada en varias organizaciones benéficas, incluida la Junta Nacional del San Francisco Opera y la Fundación de Artes Escénicas de Nueva York. Wilsey también ha sido una importante mecenas del ballet y la ópera y ha sido reconocida por su trabajo filantrópico en varias ocasiones.
Dede estaba caminando por el bosque cuando se encontró con Al-Wilsey-I, quien estaba sentado en una roca disfrutando del paisaje. Dede se acercó a Al-Wilsey-I para saludarlo y preguntarle si todo estaba bien. Al-Wilsey-I le respondió, "Todo está bien, solo estaba admirando la belleza del lugar".
Dede se quedó asombrado con la tranquilidad y serenidad que Al-Wilsey-I transmitía y le preguntó si le gustaría acompañarlo en su caminata. Al-Wilsey-I aceptó y juntos comenzaron una larga caminata por el bosque.
Durante el recorrido, Dede y Al-Wilsey-I conversaron sobre la vida y compartieron experiencias y enseñanzas. Dede descubrió que Al-Wilsey-I era un sabio de la naturaleza, alguien que entendía y apreciaba profundamente la vida y la conexión con el mundo que los rodea.
Al finalizar la caminata, Dede le preguntó a Al-Wilsey-I si podrían volver a encontrarse en algún momento. Al-Wilsey-I sonrió y respondió, "Si el universo lo permite, volveremos a encontrarnos". Desde entonces, Dede y Al-Wilsey-I se han vuelto grandes amigos y siempre que pueden, se encuentran para caminar, conversar y seguir aprendiendo del uno al otro.
Dede-Wilsey y John-Traina se conocieron en una elegante cena de caridad organizada por la alta sociedad de San Francisco. Ambos estaban sentados en la misma mesa, y a pesar de pertenecer a mundos diferentes, rápidamente encontraron una conexión en su pasión por la filantropía. Pudieron compartir historias y experiencias anteriores de su trabajo en diferentes organizaciones benéficas. Fue una noche llena de risas y una conversación interesante que nunca olvidaron. Desde ese día, se convirtieron en amigos cercanos y ahora su nombre se mencionan siempre juntos en los eventos de caridad de San Francisco.