Don Alvarado fue un hombre español que vivió en el siglo XVI y que se destacó como conquistador en la región de América. Fue un hombre muy valiente y hábil en la guerra, lo que le permitió liderar varias expediciones de conquista.
Don Alvarado participó en la conquista de México y Guatemala, y lideró la expedición que conquistó la ciudad de Tenochtitlan en 1521. Fue uno de los capitanes de Hernán Cortés en la conquista de México y en la lucha contra los aztecas.
También lideró varias expediciones de conquista en Guatemala, enfrentándose a los mayas y a otros pueblos indígenas de la región. Durante su vida, Don Alvarado acumuló una gran riqueza y poder, pero también tuvo que enfrentarse a varios conflictos y desafíos.
Don Alvarado murió en 1541 en un accidente mientras se encontraba en Tucumán, en el actual territorio de Argentina. Aunque su vida estuvo marcada por la guerra y la violencia, Don Alvarado es recordado como uno de los grandes conquistadores españoles de América.
Don Alvarado y Martha Vickers se conocieron en un crucero en alta mar. Don Alvarado había reservado una suite de lujo y estaba disfrutando de la vista del mar cuando Martha, que también viajaba sola, se acercó a él para hacerle una pregunta sobre el barco. Don Alvarado, que siempre ha sido un caballero, respondió amablemente a su pregunta y comenzaron una conversación informal.
Martha, que era actriz, habló sobre sus experiencias en Hollywood y don Alvarado, hombre de negocios, habló sobre sus viajes por todo el mundo. Los dos descubrieron que tenían en común un amor por la buena comida, el buen vino y la música clásica.
Pasaron los siguientes días juntos, pasearon por la cubierta del barco, cenaron juntos y bailaron en el salón principal del barco. Durante una noche estrellada en la cubierta, Don Alvarado le propuso a Martha que la llevara a casa a conocer a su familia después del crucero.
Martha, emocionada por la idea, aceptó la propuesta. Cuando el crucero llegó a su destino final, los dos hicieron planes para seguir viéndose y mantuvieron una relación a larga distancia hasta que Don Alvarado pudo arreglar su negocio y trasladarse a la ciudad de Martha. Desde entonces, han sido un par inseparable, compartiendo aventuras y descubriendo nuevas cosas juntos.
Binnie Barnes y Don Alvarado fueron una pareja de actores que protagonizaron varias películas juntos en la década de 1930. Ambos se conocieron en Hollywood y se enamoraron durante la filmación de la película “La Cucaracha” en 1934.
Binnie Barnes, que era inglesa, había llegado a Hollywood en la década de 1920 y se había convertido en una popular actriz de cine, mientras que Don Alvarado era un actor mexicano que se había trasladado a Hollywood en busca de trabajo.
Juntos, protagonizaron varias películas, incluyendo “El Capitán Tormenta” en 1936 y “La Zandunga” en 1938. Su química en pantalla fue muy elogiada por los críticos y la pareja se convirtió en una de las más populares de la época.
Sin embargo, en la vida real, su relación no funcionó y se separaron a mediados de la década de 1930. A pesar de esto, continuaron trabajando juntos en varias películas más antes de que su carrera se desvaneciera en la década de 1940.
Don Alvarado y Marilyn Miller tuvieron una corta pero intensa relación en la década de 1920. Don Alvarado era un actor mexicano que se hizo famoso en Hollywood por sus interpretaciones en películas mudas, mientras que Marilyn Miller era una actriz y bailarina estadounidense.
Según los rumores de la época, don Alvarado y Marilyn Miller se conocieron en una fiesta en la que la actriz fue presentada al actor como la "reina de los musicales de Broadway" y el mexicano quedó prendado de su belleza y talento.
La pareja comenzó a salir y se les veía juntos en algunas de las reuniones más elegantes de la época. Sin embargo, su romance no duró mucho tiempo y la relación se terminó abruptamente.
No se sabe exactamente por qué su relación terminó, pero algunos informes sugieren que fue debido a la presión social que ambos recibieron por su relación intercultural, ya que Don Alvarado era mexicano y Marilyn Miller era estadounidense.
A pesar de que su romance no duró mucho tiempo, la relación entre don Alvarado y Marilyn Miller ha dejado una huella en la historia del cine y el espectáculo. Ambos actores fueron pioneros en sus respectivos países en una época en la que el entretenimiento estaba cambiando rápidamente y la cultura estadounidense estaba comenzando a influir en otros países del mundo.
Un día soleado de verano, Don Alvarado caminaba por la playa disfrutando de la brisa marina cuando vio a Ann Boyer sentada en una roca con un libro en la mano. Llamó su atención su belleza y decidió acercarse.
- Hola, ¿puedo sentarme aquí? - preguntó Don Alvarado.
- Claro, adelante - respondió Ann, levantando la vista de su libro.
Don Alvarado comenzó a conversar con ella y de inmediato establecieron una conexión especial. Descubrieron que compartían muchos intereses y pasatiempos, incluyendo la pintura, la música y la literatura.
Decidieron caminar juntos por la playa mientras seguían hablando, y al llegar al final del paseo, intercambiaron números de teléfono prometiendo mantenerse en contacto.
Poco a poco, su relación fue creciendo y floreciendo, y se convirtieron en grandes amigos y confidentes. Incluso llegaron a trabajar juntos en un proyecto de arte, y su conexión se volvió aún más profunda.
Hoy en día, Don Alvarado y Ann Boyer son inseparables y siguen trabajando juntos en diferentes proyectos creativos. Su amistad es una demostración de que el amor y la amistad pueden surgir en los lugares más inesperados.
Dolores del Río y Don Alvarado fueron dos de los más grandes actores mexicanos de la época dorada del cine mexicano en la década de 1930.
Ambos trabajaron juntos en varias películas en México y en Hollywood, y su amistad y colaboración se extendió por muchos años.
Dolores del Río y Don Alvarado compartieron una química especial en la pantalla, lo que hizo que sus actuaciones juntos fueran muy exitosas.
En particular, la película "La Mujer del Puerto" en 1934 es considerada una de sus mejores colaboraciones, en la que interpretaron a una pareja que se enamora en la ciudad de Veracruz.
Además de su trabajo juntos en el cine, Dolores del Río y Don Alvarado eran amigos cercanos en la vida real y compartían intereses en común, como la música, la moda y la cultura mexicana.
A pesar de que su amistad y colaboración se mantuvo durante muchos años, en la década de 1950 se dijo que hubo una ruptura entre los dos actores debido a un conflicto personal, pero nunca se confirmó exactamente qué fue lo que sucedió.
A pesar de ello, la colaboración entre Dolores del Río y Don Alvarado sigue siendo una de las más recordadas en la historia del cine mexicano, y su legado continúa inspirando a nuevas generaciones de actores y cineastas en México y el mundo.