QQCQ

Dorothy Mcneill

Dorothy Mcneill

Dorothy McNeill fue una estadounidense nacida en 1915 en Washington y que falleció en 1998. Durante su vida se dedicó a investigar y estudiar la vida de los pueblos indígenas americanos, especialmente de los Navajo y Hopi.

A lo largo de su carrera, McNeill publicó varios libros y artículos sobre los pueblos americanos, incluyendo "The Last Blanket" sobre los Navajo, que le valió el prestigioso premio Pulitzer en 1977. Además de su trabajo académico, McNeill también fue activista por los derechos civiles y por la igualdad de género en una época en la que las mujeres sufrían una discriminación evidente.

En definitiva, Dorothy McNeill fue una mujer dedicada a la investigación y al activismo por la igualdad en una época en la que no era fácil ser mujer en ámbitos generalmente dominados por hombres. Su trabajo permitió un mayor conocimiento y comprensión de la cultura de los pueblos nativos americanos, y su lucha contribuyó a avanzar en la lucha feminista.

Relaciones amorosas

Augustus John

Augustus John

Esposo de Dorothy Mcneill

1907

Augustus John y Dorothy McNeill tuvieron una relación amorosa y prolongada que comenzó en la década de 1890 y duró hasta la muerte de McNeill en 1967. John era un famoso pintor galés, mientras que McNeill era una joven modelo y actriz escocesa que se convirtió en su musa y compañera.

La relación entre John y McNeill fue tumultuosa y a menudo considerada escandalosa por la sociedad conservadora de la época. La pareja nunca se casó, pero tuvieron cuatro hijos juntos, uno de los cuales falleció en la infancia. También tuvieron una hijastra de un matrimonio anterior de John.

A lo largo de su vida juntos, John pintó a McNeill en numerosas ocasiones, inmortalizando su belleza y gracia en sus obras de arte. A pesar de los altibajos en su relación, John y McNeill permanecieron unidos y ella lo cuidó hasta su muerte en 1961.

McNeill siguió siendo parte de la comunidad artística de Londres después de la muerte de John y mantuvo su relación cercana con sus hijos y nietos. Se la recuerda como un personaje colorido e inspirador que dejó una marca indeleble en la vida de quienes la conocieron.