El Dr. Harvey R. Cummins nació en 1913 en California, Estados Unidos. Obtuvo su licenciatura en biología en la Universidad de California en Berkeley en 1934 y posteriormente su Doctorado en Filosofía en Genética en la Universidad de California en Los Ángeles en 1939.
Comenzó su carrera como investigador en la Universidad de Stanford, donde trabajó en el laboratorio del renombrado genetista Thomas Hunt Morgan. Más tarde se trasladó a la Universidad de Indiana, donde continuó sus investigaciones genéticas.
En 1948, el Dr. Cummins se unió al Departamento de Genética en la Universidad de Virginia, donde pasó gran parte de su carrera profesional. Allí, se convirtió en uno de los principales expertos en genética cromosómica y citogenética de invertebrados, y realizó importantes contribuciones al campo de la biología molecular.
También fue un destacado educador y mentor para muchos estudiantes de posgrado y posdoctorado. Fue un miembro activo de numerosas sociedades científicas, incluyendo la Sociedad Americana de Genética, la Sociedad de Biología Molecular y Celular, y la Sociedad de Biología Marina.
El Dr. Cummins falleció en 2004 a la edad de 91 años, pero sus contribuciones a la genética y la biología molecular continúan siendo valoradas y respetadas en todo el mundo.
Un día soleado en la ciudad, Dr. Harvey R. Cummins caminaba por la calle cuando de repente se topó con Osa Massen. Ambos se quedaron mirando el uno al otro, sin saber qué decir. Después de unos segundos, Osa rompió el hielo y le preguntó a Harvey si sabía cómo llegar a una dirección en particular. Harvey, quien conocía la zona, se ofreció a acompañarla y mostrarle el camino. Durante el trayecto, descubrieron que tenían intereses en común y comenzaron a conversar de manera amena. Al final del recorrido, intercambiaron números de teléfono prometiéndose mantenerse en contacto. Así fue como la casualidad los unió y comenzó una gran amistad.