Eddie Hall es un exfisicoculturista y levantador de pesas británico, nacido el 15 de enero de 1988 en Newcastle-Under-Lyme, Inglaterra. Desde su juventud mostró un gran interés y habilidad por el levantamiento de pesas y la fuerza física, y comenzó su carrera como fisicoculturista a los 16 años.
En 2010, a los 22 años, ganó el título de Mr. Inglaterra de la Federación Mundial de Fisicoculturismo y Fitness, y en 2011, se convirtió en profesional de la IFBB (International Federation of BodyBuilding and Fitness).
En 2014, Eddie decidió cambiar su enfoque y comenzó a entrenar para competencias de levantamiento de pesas, una disciplina que siempre había disfrutado. En 2015, estableció un récord mundial en la competencia de levantamiento de peso muerto, al levantar 463 kilogramos (1,020 libras), superando el récord anterior de 460 kilogramos (1,014 libras). Luego, en 2016, ganó el título de hombre más fuerte del mundo, convirtiéndose en el primer británico en lograrlo desde 1993.
A pesar de su éxito, Eddie decidió retirarse del deporte de alto rendimiento en 2018, debido a las lesiones y peligros asociados con la competencia de levantamiento de pesas. Desde entonces, ha seguido siendo activo en la comunidad del levantamiento de pesas, ofreciendo entrenamientos y asesoramiento a otros y ha aparecido en varios programas de televisión y documentales sobre la fuerza física.
Eddie ha estado casado desde 2012 y tiene dos hijos. También ha escrito un libro autobiográfico llamado "Strongman: Mi historia" en el que cuenta su experiencia en el deporte y cómo ha logrado sus éxitos.
Eddie-Hall y Flower-Parry se conocieron en una competencia de levantamiento de pesas. Eddie estaba ansioso por competir en la categoría de peso pesado, mientras que Flower estaba lista para demostrar sus habilidades en la categoría de peso ligero. A medida que la competencia avanzaba, ambos se destacaron por su increíble fuerza y resistencia. Después de la competencia, Eddie y Flower se encontraron en la zona de recuperación, donde comenzaron a hablar sobre sus entrenamientos y la vida en general. Al darse cuenta de que compartían muchos intereses, pronto se convirtieron en amigos cercanos y comenzaron a entrenar juntos regularmente. Hoy en día, Eddie y Flower continúan compitiendo y entrenando juntos, recordando cómo se conocieron en ese día memorable de competición de levantamiento de pesas.