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Edgar Rosenberg

Edgar Rosenberg

Edgar Rosenberg nació el 6 de septiembre de 1925 en Bremerhaven, Alemania. Después de la Segunda Guerra Mundial, se mudó a Estados Unidos donde se convirtió en productor de televisión en Los Ángeles. Fue productor ejecutivo de programas de televisión como "The Merv Griffin Show", "The Mike Douglas Show" y "The Tonight Show Starring Johnny Carson".

En 1975, Rosenberg se casó con la comediante Joan Rivers y se convirtió en su mánager. Trabajaron juntos en programas de televisión y en la carrera de Rivers como comediante y presentadora de televisión. En 1987, Rosenberg dejó su trabajo como mánager de Rivers después de una disputa con su esposa sobre su carrera y sus finanzas.

En el mismo año, Rosenberg se suicidó a los 62 años de edad. Dejó una nota en la que decía que sus problemas financieros, su matrimonio y su carrera habían contribuido a su decisión de quitarse la vida. Rivers afirmó que la muerte de su esposo fue el momento más doloroso de su vida y que nunca superaría la pérdida.

Relaciones amorosas

Joan Rivers

Joan Rivers

Esposa de Edgar Rosenberg

1965 - 1987

Edgar Rosenberg y Joan Rivers estuvieron casados desde 1965 hasta la muerte de Rosenberg en 1987. Rosenberg fue un productor de televisión y un hombre de negocios alemán que conoció a Rivers cuando ella era una comediante emergente en la década de 1960. Juntos tuvieron una hija llamada Melissa Rivers, también productora y personalidad de televisión.

Rosenberg ayudó a lanzar la carrera de Rivers y se convirtió en su mánager en 1970. Fue competente en la gestión de la carrera de su esposa y juntos tuvieron éxito en la televisión y en los negocios, aunque también tuvieron dificultades financieras durante una parte de su matrimonio.

Trágicamente, Rosenberg se suicidó en 1987 en un hotel en Filadelfia después de que el programa televisivo "The Late Show starring Joan Rivers" fue cancelado tras sólo un año en el aire.

La pérdida de Rosenberg fue un golpe devastador para Rivers y tuvo un impacto duradero en su vida personal y profesional. Rivers lamentó profundamente la muerte de su esposo y habló de él con cariño y admiración en muchas entrevistas a lo largo de los años. En su autobiografía de 1997 "Bouncing Back", Rivers escribió que "la muerte de Edgar fue terriblemente trágica e inútil, y su ausencia es algo que siento todos los días de mi vida".