Édith Piaf fue una cantante francesa nacida en 1915 y fallecida en 1963. Nacida en una familia humilde de París, comenzó su carrera musical como cantante callejera y en bares de mala reputación a los quince años. En 1935, fue descubierta por el director de un cabaret y su carrera despegó. Su voz única y emotiva la llevó a convertirse en una estrella de la música francesa y mundial. Piaf también tuvo una vida personal tumultuosa, enfrentando la muerte de su hija a los dos años, un grave accidente automovilístico y la adicción a las drogas y el alcohol. A pesar de estos problemas, continuó cantando y escribiendo canciones que se convirtieron en clásicos del repertorio francés, como "La Vie en Rose" y "Non, Je Ne Regrette Rien", entre otros. Piaf se convirtió en un ícono de la música francesa y su legado ha trascendido los años. A menudo se la conoce como la "pequeña gorrión" por su apodo y su pequeña figura, pero su voz poderosa e intensa la dejará siempre en la memoria de sus fans como una de las artistas más grandes e influyentes de su época.