Elisabeth of Romania, también conocida como Carmen Sylva, nació el 29 de diciembre de 1843 en Neuwied, Alemania. Era hija del príncipe Hermann de Wied y de la princesa María de Nassau. En 1869, se casó con Carlos I de Rumania y se convirtió en reina consorte.
Elisabeth fue una escritora prolífica y talentosa, escribía poesía, cuentos y obras de teatro. También fue una gran defensora de las artes y la cultura, y promovió la educación para las mujeres.
Durante la Primera Guerra Mundial, Elisabeth trabajó como enfermera en hospitales de campaña y organizó servicios médicos para las tropas rumanas. Tras la guerra, dedicó gran parte de su tiempo y esfuerzo a la reconstrucción de las áreas afectadas por el conflicto.
Elisabeth falleció en 1916, a los 72 años, en su residencia en Balcic, Bulgaria. Su legado como escritora y defensora de la cultura y la educación sigue siendo recordado y admirado hoy en día.
Elisabeth de Rumania y George II de Grecia fueron una pareja real que se casó en 1921. Elisabeth era la hija menor del rey Fernando I de Rumania y la reina María de Edimburgo, mientras que George era el segundo hijo del rey Constantino I de Grecia y la reina Sofía.
Elisabeth y George se conocieron en la corte rumana cuando George, todavía príncipe heredero, realizó una visita a Rumania en 1914. Sin embargo, la Primera Guerra Mundial retrasó su relación y no fue hasta 1920 cuando se reunieron nuevamente en Grecia y decidieron casarse.
El matrimonio de Elisabeth y George fue considerado un éxito y duró hasta la muerte de George en 1947. Tuvieron tres hijos juntos: Paul, Irene y Alejandra.
Durante su matrimonio, Elisabeth y George estuvieron involucrados en la política y la vida pública de Grecia. En 1922, George fue nombrado rey de Grecia después de un golpe militar y Elisabeth fue coronada como reina consorte.
Sin embargo, su reinado estuvo marcado por la inestabilidad política y la tensión con Turquía. En 1935, George fue obligado a abdicar por un referéndum que estableció una república en Grecia.
Después de la abdicación de George, Elisabeth continuó siendo activa en la vida política de Grecia y se convirtió en una figura influyente en los círculos aristocráticos internacionales. También trabajó en varias obras de caridad y fundó la Sociedad Helénica de Protección de la Madre y el Niño.
Elisabeth murió en 1956, nueve años después de la muerte de su esposo.