Eliza Jedrzejewska nació en Polonia en 1909. Desde joven mostró un gran amor por la educación, especialmente por la lengua polaca. Después de trabajar en varios trabajos mal remunerados, se dedicó a la enseñanza de niños en una escuela en Polonia. Más tarde, se trasladó a Inglaterra, donde se convirtió encriada de Sir Winston Churchill, pero también enseñó polaco en su tiempo libre.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Eliza regresó a Polonia para unirse a la lucha contra los nazis como parte de la Resistencia Polaca. Fue arrestada y encarcelada, pero logró escapar y unirse a las fuerzas aliadas en Europa.
Después de la guerra, Eliza emigró a Australia, donde trabajó como profesora de polaco, escribió libros sobre la historia polaca y se convirtió en un miembro activo de la comunidad polaca en Australia. A pesar de los obstáculos y las dificultades que enfrentó a lo largo de su vida, Eliza siguió siendo una defensora de la educación y la lengua polaca, y su legado sigue vivo en la comunidad polaca de Australia. Murió en 2002 a la edad de 93 años.
Eliza y Dariusz se conocieron en un día soleado de verano mientras paseaban por el parque central de la ciudad. Ambos estaban sentados en un banco cerca del lago y se percataron de que estaban tomando el mismo libro en sus manos. Sin dudarlo, comenzaron a hablar sobre el libro y descubrieron que tenían muchos intereses en común. Después de varias horas de conversación, Dariusz invitó a Eliza a un café cercano y desde ese momento, comenzaron a salir juntos. Con el tiempo, su amor floreció y ahora son inseparables.