Gabriel Fauré nació en Pamiers, Francia, en 1845. Fue un compositor y organista francés que se destacó en la música clásica del siglo XIX y principios del XX. A pesar de sufrir de problemas de audición, su talento fue reconocido temprano y comenzó a estudiar música a los nueve años de edad. En 1858, fue admitido en el Conservatorio de París, donde estudió con algunos de los compositores más importantes de su época, como Camille Saint-Saëns y Jules Massenet. En 1877, se convirtió en el director de música en la Église de la Madeleine en París, y en 1896 fue nombrado director del Conservatorio de París. La música de Fauré se caracteriza por su delicadeza y sensibilidad. Entre las obras más destacadas se encuentran sus canciones, música de cámara y sus piezas para piano. También compuso varias obras corales, incluyendo el famoso Requiem en D menor. Fauré murió en París en 1924, a la edad de 79 años. A pesar de que nunca se volvió ampliamente conocido durante su vida, su música sigue siendo apreciada hasta el día de hoy y es considerado uno de los mayores compositores de la música clásica francesa.