Como modelo y presentadora de televisión, Gabriela Blondeau se convirtió en uno de los rostros más conocidos de la televisión argentina en los años 90. También conocida como Gabriela Sari, nació en Buenos Aires en 1963 y desde joven comenzó a trabajar como modelo. En 1990, se unió al equipo de presentadores del programa de entretenimiento Hola Susana, conducido por Susana Giménez, y se convirtió en uno de los personajes más populares del elenco.
Blondeau participó en varias producciones de televisión y cine, incluyendo su aparición como ella misma en la película argentina de 1993, La nave de los locos. También fue conocida por su participación en el programa de televisión de variedades Gasoleros, donde desempeñó el papel de Ana.
En su vida personal, Gabriela se casó con Horacio Sari en 1989 y tuvo dos hijos con él, Gonzalo y Federico. Sin embargo, la pareja se separó en 2002 y Gabriela se mudó a Miami para comenzar una nueva vida.
Durante su tiempo en los Estados Unidos, Gabriela se dedicó a la producción de televisión y trabajó en la industria del entretenimiento. Regresó a Argentina en 2007 y siguió trabajando en televisión en varios programas y comerciales.
En 2017, Gabriela Blondeau fue noticia por un caso de fraude en el que se vio involucrada. Fue condenada a tres años de prisión por haber defraudado a la Aduana argentina en más de $11 millones de pesos.
A lo largo de su carrera, Gabriela Blondeau fue una figura popular de la televisión argentina y dejó su huella en el mundo del entretenimiento.
Gabriela Blondeau y Roberto Pettinato tuvieron una relación amorosa durante varios años en la década de 1980. Blondeau era modelo y Pettinato, músico y conductor de televisión, se conocieron en un evento social en Buenos Aires y comenzaron a salir.
La relación entre ambos fue intensa y tumultuosa, marcada por fuertes discusiones y altibajos, aunque también hubo momentos de felicidad.
Sin embargo, la pareja finalmente se separó por diferencias irreconciliables y cada uno siguió su camino. Pettinato continuó su carrera en la televisión y la música, mientras que Blondeau se retiró del mundo de la moda y se enfocó en su vida privada.
A pesar de haber terminado su relación hace muchos años, la pareja todavía es recordada como una de las más emblemáticas de la escena cultural argentina de los años 80.