Alexander McQueen

Novio de George Forsyth

Un día soleado en el centro de Londres, George Forsyth paseaba por las calles buscando algo de inspiración para su nueva colección de moda. De repente, se topó con una tienda de ropa que estaba llamando su atención, y decidió entrar.

Mientras observaba los maravillosos diseños de Alexander McQueen, un hombre algo tímido se le acercó presentándose como el asistente personal del diseñador. George se sorprendió al escuchar esto, ya que era un gran admirador del trabajo de Alexander.

De repente, Alexander entró en la tienda, y George no pudo evitar quedarse boquiabierto. Alexander lo notó y sonrió, dándole la bienvenida y ofreciéndole una taza de té. George se sintió aliviado y agradecido, y juntos empezaron a hablar sobre moda, diseño y arte.

Poco a poco se dieron cuenta que ambos compartían la misma pasión y visión, y decidieron colaborar juntos en proyectos futuros. Desde ese día, George y Alexander se convirtieron en grandes amigos y colaboradores en la industria de la moda.