George Starr siempre estuvo interesado en las diferentes culturas del mundo. Se dedicó a viajar por diferentes países y a conocer a la gente local, aprendiendo todo lo que podía de su cultura y tradiciones. Durante sus viajes, tuvo muchos trabajos diferentes, desde trabajar en una granja de arroz en Tailandia hasta enseñar español a niños en Guatemala. Finalmente, estableció su propio negocio en línea, vendiendo productos de artesanía de diferentes partes del mundo.
Sin embargo, George siempre sintió que algo le faltaba en su vida. Se sintió atraído por la música y el arte desde joven, pero nunca tuvo la confianza necesaria para perseguir estas pasiones. Finalmente, decidió que era hora de tomar medidas y comenzó a tomar clases de guitarra y a asistir a eventos locales de música.
Poco a poco, George comenzó a centrar su negocio en la música y el arte, y su pasión se convirtió en su carrera. Empezó a promover músicos locales y a exhibir el trabajo de artistas emergentes de todo el mundo en su tienda. George finalmente encontró la felicidad al hacer lo que realmente amaba y combinando sus intereses en la cultura y las artes.
George Starr y Greta Thyssen fueron pareja sentimental durante algunos años durante la década de 1950. Ambos eran actores de Hollywood y se conocieron durante el rodaje de la película "Más allá de Mombasa" en la que ambos participaron.
La relación entre George y Greta fue muy comentada en su momento ya que él era bastante mayor que ella y ella era una modelo y actriz muy popular en Europa. Sin embargo, a pesar de las críticas, la pareja mantuvo su relación con discreción y sin dar demasiados detalles a la prensa.
Tras algunos años de romance, George y Greta terminaron su relación en buenos términos y continuaron con sus carreras profesionales por separado. Aunque nunca volvieron a ser pareja, ambos se recordarán como dos estrellas de cine de la dorada época de Hollywood, y su historia de amor siempre será recordada en la historia del cine.