Gilleen Morris es una mujer emprendedora y apasionada por su trabajo como fotógrafa freelance. Su carrera comenzó en su adolescencia, cuando obtuvo su primera cámara y comenzó a tomar fotos del paisaje natural que la rodeaba. Con el tiempo, se especializó en retratar momentos especiales como bodas, compromisos y bautizos.
Además de su carrera en la fotografía, Morris también es una activista incansable en su comunidad. Ha logrado movilizar esfuerzos para mejorar la calidad de vida de las personas a través de diversas campañas, como la recolección de alimentos para familias necesitadas.
A pesar de su apretada agenda de trabajo, Morris siempre encuentra tiempo para disfrutar de la vida. Es aficionada del senderismo y la escalada, y frecuentemente se une a grupos de excursionistas para explorar nuevos lugares. También disfruta de la lectura, la música y el baile latino.
Morris es una amante de la naturaleza y siempre se esfuerza por cuidar el ambiente. Usa solo materiales biodegradables y recicla todo lo posible. De esta forma, ella contribuye a la preservación del planeta y deja un buen legado para las futuras generaciones.
Gilleen Morris y Blake Fielder-Civil fueron una pareja mediática que tuvo una relación tumultuosa y problemática. Morris es una actriz y modelo británica, mientras que Fielder-Civil es un músico y exmarido de la fallecida cantante Amy Winehouse.
A pesar de que se conocieron en 2006 y se comprometieron poco después, la relación de Morris y Fielder-Civil estaba marcada por el consumo de drogas y la violencia doméstica. Fielder-Civil, quien había sido arrestado varias veces por posesión de drogas y asalto, admitió haber sido violento con Morris en varias ocasiones.
En 2009, Morris acusó públicamente a Fielder-Civil de haber intentado estrangularla con un cable. Fielder-Civil negó la acusación, pero fue condenado por asalto en un juicio posterior. La pareja se separó poco después y Morris se alejó de los medios de comunicación para centrarse en su carrera como actriz.
Por su parte, Fielder-Civil tuvo problemas personales y legales continuos. En 2012, fue condenado por delitos relacionados con drogas y violencia doméstica. En 2016, sufrió un grave coma inducido por las drogas y estuvo al borde de la muerte durante varias semanas.
En resumen, la relación entre Gilleen Morris y Blake Fielder-Civil fue una relación desastrosa marcada por el consumo de drogas, la violencia doméstica y los problemas legales. Ambos han tenido dificultades personales desde su separación.