Harry Jackson (1924-2011) fue un artista estadounidense nacido en Chicago. Estudió arte en la Universidad de Wyoming y posteriormente se trasladó a Nueva York donde se convirtió en un importante exponente del movimiento del expresionismo abstracto. Destacó por su trabajo en escultura, ganó varios premios y realizó importantes encargos, como el monumento a los cowboys en Cheyenne (Wyoming). Además de su carrera artística, Jackson también se interesó por la literatura y la poesía, y llegó a publicar varios libros. Falleció en su casa de Wyoming en 2011, dejando tras de sí una gran obra y un importante legado en el mundo del arte.