Hayley Karrina se graduó de la universidad con una licenciatura en marketing y pasó la mayor parte de sus primeros años de carrera trabajando en agencias de publicidad. Sin embargo, su verdadera pasión siempre había sido la música, y decidió tomar un giro drástico en su carrera para perseguir ese sueño. Comenzó a escribir canciones y a presentarse en pequeños clubes locales en su tiempo libre. Pronto, su talento fue descubierto por un productor de música y se lanzó su primer álbum. A partir de ese momento, su carrera despegó y se convirtió en una de las cantantes más populares de la década de 1990. A pesar de su éxito, Hayley nunca perdió de vista sus raíces humildes y siempre hizo tiempo para trabajar en su comunidad. Ahora, aunque su carrera ha disminuido un poco, sigue haciendo música y trabajando diligentemente para asegurarse de que su legado se mantenga vivo.
Aubrey y Hayley se conocieron en una fiesta en Toronto. Había mucha gente, pero se encontraron por casualidad en la mesa de bebidas. Hablaron un poco y se dieron cuenta de que compartían gustos musicales similares. Después de la fiesta, intercambiaron números de teléfono y comenzaron a hablar y a salir juntos. Descubrieron que también compartían una pasión por el arte y empezaron a crear música juntos. Pronto se dieron cuenta de que la química era perfecta y la colaboración dio lugar a una gran amistad. Hoy en día, trabajan juntos en cada proyecto y su amistad sigue siendo tan fuerte como cuando se conocieron aquella noche en la fiesta.