Hendrik Christian Andersen (31 de abril de 1872 – 19 de diciembre de 1940) fue un escultor estadounidense de origen danés que vivió y trabajó en Italia, Francia y Estados Unidos.
Nacido en Bergen, Noruega, Andersen emigró a los Estados Unidos con su familia a los diez años. En Nueva York, asistió a la Real Academia de Arte y luego se trasladó a París, donde estudió en la École des Beaux-Arts. Andersen fue un artista prolífico que trabajó en una variedad de materiales, incluyendo bronce, mármol y ónix. También hizo grabados, pinturas y escenografías para la ópera.
Sus esculturas suelen estar inspiradas en la mitología clásica y en motivos religiosos, aunque también realizó retratos de personajes públicos. Andersen fue respetado en su época por su enfoque clásico y por las técnicas de esculpido altamente detalladas y precisas que utilizaba en sus obras.
Andersen regresó a Estados Unidos y se mudó a Roma en 1921, donde estableció su estudio en la Villa Strohl-Fern y continuó produciendo obras de arte de gran belleza y calidad. Falleció en Roma en 1940, a los 68 años de edad. Hoy en día, sus obras se pueden encontrar en importantes colecciones públicas y privadas en todo el mundo, incluyendo el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York y la Galería Nacional de Arte de Washington D.C.
Hendrik Christian Andersen y Henry James eran amigos y colegas cercanos en la comunidad artística de Europa a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Ambos eran artistas y escritores estadounidenses que vivían principalmente en Europa, y se conocieron en Roma en 1899.
Andersen era un escultor conocido por sus monumentos y esculturas decorativas, mientras que James era un escritor famoso por sus novelas y cuentos. Los dos tenían una pasión compartida por el arte y la literatura y se convirtieron en amigos cercanos. Andersen creó algunas esculturas basadas en personajes de algunas novelas de James, como "Retrato de una Dama" y "Los Embajadores".
James también ayudó a promocionar el trabajo de Andersen, escribiendo en su ensayo "The Malady of the Artist" sobre las obras del escultor. James también posó para una escultura de bronce de Andersen, que más tarde se instaló en la Biblioteca Pública de Nueva York.
La relación entre Andersen y James fue importante para ambos artistas, y su amistad y colaboración son un ejemplo de la influencia mutua entre personas de diferentes disciplinas artísticas.