Henri de Jouvenel des Ursins fue un periodista, político y diplomático francés que nació en París en 1876 y falleció en 1935. Tras estudiar derecho y filosofía, comenzó su carrera periodística en varios diarios franceses, y en 1903 fue nombrado corresponsal en Berlín del diario "Le Figaro". En 1907 fue elegido diputado de la Asamblea Nacional francesa y en 1912 se convirtió en Ministro de Información en el gobierno de Raymond Poincaré.
Durante la Primera Guerra Mundial, sirvió como oficial de enlace del ejército francés con las fuerzas británicas y, tras la guerra, fue nombrado embajador francés en Italia y luego en España.
Henri de Jouvenel fue un diplomático eficiente, pero también un político polémico y controvertido. Era conocido por sus posturas liberales y por su defensa de los derechos de las mujeres y las minorías. Su matrimonio con la escritora Colette, con quien tuvo una hija, también fue objeto de atención en la prensa.
Tras retirarse de la política en 1926, Henri de Jouvenel se dedicó a escribir y publicar sus memorias, que son una fuente importante para comprender la vida política y social de Francia durante el siglo XX.
Henri de Jouvenel des Ursins y Colette tuvieron una relación amorosa y tumultuosa que duró varios años. Henri era un periodista y escritor francés, y Colette era una afamada escritora y actriz. Ambos se conocieron en 1906, cuando Henri estaba casado con una mujer mayor que él y Colette estaba casada con el escritor Willy.
Henri se convirtió en el amante de Colette poco después de conocerla, y comenzaron una relación apasionada e intensa. Colette estaba enamorada de Henri y le dedicó varios de sus escritos, incluyendo la novela "La Vagabunda", que cuenta la historia de una mujer que lucha por su independencia en una sociedad patriarcal.
Sin embargo, la relación entre Henri y Colette no fue fácil. Henri era un hombre mujeriego y celoso, y a menudo se mostraba posesivo y controlador con Colette. Además, su esposa descubrió la relación y se negó a divorciarse, lo que generó un gran escándalo en la sociedad francesa de la época.
A pesar de los obstáculos, Henri y Colette siguieron viéndose en secreto durante varios años, hasta que Henri finalmente dejó a su esposa en 1913 para casarse con Colette. Sin embargo, el matrimonio no funcionó y la pareja se separó en 1923.
A pesar de su relación tumultuosa, Henri y Colette mantuvieron una amistad cercana hasta la muerte de Henri en 1932. Colette lo recordó como un hombre apasionado y carismático, y lo describió como su gran amor en varias de sus obras literarias.