Henry Pu-yi

Henry Pu-yi fue el último emperador de la dinastía Qing de China y el último emperador de China en general. Nació en Beijing en 1906 y ascendió al trono a la edad de dos años en 1908. Sin embargo, la dinastía Qing fue derrocada en 1911 y Pu-yi fue obligado a abdicar. En 1932, el ejército japonés instaló a Pu-yi como el "Emperador del Manchukuo", un estado títere en el norte de China controlado por los japoneses. Permaneció allí hasta 1945, cuando los japoneses fueron derrotados por los aliados durante la Segunda Guerra Mundial. Después de la guerra, Pu-yi fue capturado por el Ejército soviético y llevado a un campo de prisioneros en Siberia. Allí se le obligó a renunciar a todas sus pretensiones al trono y en 1950 fue entregado al gobierno comunista de China. En el régimen comunista, Pu-yi fue reeducado y reformado y trabajó como jardinero y bibliotecario durante varios años. Finalmente fue liberado y vivió una vida relativamente tranquila hasta su muerte en 1967. Aunque había perdido su estatus imperial, Pu-yi se convirtió en una figura conocida en su país y en todo el mundo gracias a varias películas y libros sobre su vida.