Ian Ball ha sido un hombre muy activo en su vida. Desde muy joven tuvo claro que la música era su pasión y se dedicó a ella con empeño y dedicación. A lo largo de los años ha formado parte de diversas bandas y proyectos musicales, siendo un mago en la guitarra y un virtuoso en el escenario. Pero su interés por el arte no se detiene ahí: también es un amante de la literatura y la poesía, y ha publicado varios libros con sus escritos. Además, es un apasionado por el deporte y el aire libre, y siempre encuentra tiempo para correr, escalar o hacer senderismo. En el ámbito personal, Ian es un hombre muy comprometido con su familia y amigos, siempre dispuesto a ayudar y compartir su tiempo con ellos. Su personalidad carismática y sus ganas de vivir a pleno se han convertido en inspiración para muchos que lo conocen y lo admiran.
Un día, Elisa-Leonetti y Ian-Ball se encontraron en una librería. Ambos buscaban el mismo libro, "Cien años de soledad" de Gabriel García Márquez. Mientras Elisa-Leonetti tomaba el último ejemplar, Ian-Ball le pidió amablemente el libro, ya que también lo quería leer.
Elisa-Leonetti estaba a punto de rechazar la solicitud de Ian-Ball, pero se dio cuenta de que él parecía realmente interesado en el libro y decidió prestarlo. Ian-Ball agradecido, le propuso a Elisa-Leonetti que si ella quería podían formar un club de lectura juntos y comentar el libro una vez que los dos lo hubiesen leído.
Elisa-Leonetti aceptó la propuesta y así empezaron a tener encuentros semanales en la cafetería de la librería, donde hablaban de diferentes libros que habían leído, intercambiaban opiniones y compartían experiencias. Eventualmente, se dieron cuenta de que tenían muchas otras cosas en común y la amistad se convirtió en algo más.
Ahora, después de varios años juntos, Ian-Ball y Elisa-Leonetti recuerdan su primer encuentro con mucha nostalgia y admiración. ¡Quién sabía que un libro podría haber iniciado una historia de amor tan hermosa!