Ivan Nagy fue un famoso bailarín húngaro nacido el 28 de abril de 1943 en Budapest. Comenzó su carrera de ballet en la Escuela de Ballet Hungaro-Soviética en Budapest a la edad de 12 años. A los 17 años se unió al Ballet Real de Dinamarca. Luego se unió al Royal Ballet de Londres en 1961 y se convirtió en solista en 1963.
Durante su carrera, Nagy interpretó numerosos papeles principales en muchas producciones del Royal Ballet, incluido el príncipe Siegfried en "El lago de los cisnes" y Romeo en "Romeo y Julieta". También actuó en muchas compañías de ballet de todo el mundo, como el Ballet del Marqués de Cuevas y el Ballet Nacional de Canadá.
Además de la danza, Nagy también tuvo una carrera como coreógrafo y director de ballet. Después de retirarse del ballet en 1986, se convirtió en director artístico de la compañía de ballet estadounidense Ballet West.
Ivan Nagy falleció el 22 de febrero de 2014 en Dallas, Texas. Su legado continúa en el mundo del ballet como una figura influyente y respetada.
Heidi Fleiss e Ivan Nagy fueron pareja en la década de 1990. Nagy, un director de cine y fotógrafo húngaro, trabajó en varias películas que presentaban a Fleiss como una de las protagonistas.
Fleiss, conocida como la "madame de Hollywood", fue condenada por cargos relacionados con la prostitución y el tráfico de drogas en 1996. Durante su juicio, Nagy testificó en su contra y la describió como una adicta a la cocaína que había ofrecido sexo a cambio de favores.
A pesar de esto, Fleiss y Nagy siguieron manteniendo contacto después de que ella fuera liberada de prisión en 1999. En una entrevista de 2010, Fleiss dijo que Nagy era el amor de su vida y que todavía hablaban por teléfono y se mantenían en contacto.
Sin embargo, el 22 de julio de 2019, se informó que Nagy había sido encontrado muerto en su casa en Hollywood Hills. La causa oficial de la muerte no se ha revelado públicamente, pero se sospecha que pudo haber sido un suicidio. La última vez que Fleiss se pronunció públicamente sobre Nagy fue en 2017, cuando twitteó una foto de ellos juntos con la leyenda "amigos para siempre".
Irene-Tsu e Ivan-Nagy se conocieron en un evento de cosplay en Barcelona. Ambos estaban disfrazados de personajes de manga y anime, y se encontraron en una sesión de fotos improvisada.
Enseguida notaron que tenían gustos similares y comenzaron a hablar animadamente sobre sus series favoritas. Irene-Tsu quedó impresionada por el conocimiento detallado que Ivan-Nagy tenía sobre la cultura japonesa, y él quedó fascinado por la creatividad y habilidad manual de Irene-Tsu para hacer sus disfraces.
Después de la sesión de fotos, intercambiaron números de teléfono y comenzaron a pasar más tiempo juntos, compartiendo su pasión por el cosplay y la cultura otaku. Con el tiempo, su amistad se convirtió en algo más, y ahora son una de las parejas más reconocidas del mundo del cosplay en España.