Jack Belgrove

Jack Belgrove había sido un abogado de éxito en su juventud, pero con el paso de los años se había cansado de la vida en la ciudad y decidió mudarse a una pequeña villa en la costa. Allí abrió su propio restaurante, al que llamó "La Ola Perfecta", en honor a su afición por el surf.

La vida en la villa le permitió desconectar de la presión de su antiguo trabajo y dedicarse a su verdadera pasión: cocinar. Su restaurante se convirtió en un éxito y Jack se hizo famoso por sus platos de pescado fresco, preparados cada día con los ingredientes que conseguía en el puerto cercano.

Pero no todo era felicidad en la vida de Jack. Estaba soltero y su trabajo lo mantenía ocupado casi todo el día, lo que le dejaba poco tiempo para socializar. Además, todavía tenía que lidiar con el estrés de su antigua profesión, que a veces se filtraba en su vida diaria.

A pesar de todo, Jack estaba contento con su vida y se sentía afortunado de haber encontrado su lugar en el mundo. El mar siempre había sido su refugio, y ahora era también su sustento.