Jack McManus había sido un hombre exitoso en su juventud, pero últimamente se había sentido estancado en su carrera. A pesar de sus años de experiencia y habilidades, se sentía como si estuviera atrapado en una zona de confort que le impedía progresar y explorar nuevas oportunidades.
Sin embargo, esto cambió cuando decidió darle un giro radical a su vida y comenzó a experimentar con diferentes formas de expresión creativa. Descubrió en la pintura y la escritura una pasión que le había estado faltando en su vida y decidió dedicar tiempo y energía para mejorar sus habilidades en estas áreas.
Con el tiempo, sus obras se volvieron cada vez más notables, atrayendo la atención de críticos y coleccionistas de arte de todo el mundo. Esta nueva fase en su vida le trajo una renovada sensación de propósito y satisfacción que no había experimentado en años.
Jack decidió que continuaría explorando y evolucionando como artista, mientras mantenía un equilibrio saludable entre su trabajo y su pasión creativa. Se sentía agradecido por haber encontrado algo que le apasionara tanto y esperaba poder seguir compartiendo su trabajo con el mundo.
Martine McCutcheon y Jack McManus se conocieron en el año 2006 y comenzaron a salir poco después. En marzo de 2012, la pareja se comprometió y se casaron en septiembre del mismo año en el lujoso hotel Lake Como en Italia.
Tanto McCutcheon como McManus han hablado públicamente sobre su amor mutuo en varias ocasiones y los dos parecen estar muy enamorados y felices juntos. En diciembre de 2014, la pareja dio la bienvenida a su primer hijo, un niño llamado Rafferty Jack McManus.
La relación de McCutcheon y McManus parece ser cálida y positiva, y han sido una pareja muy unida durante muchos años.