Como modelo de lucha libre, se sabe poco sobre la vida personal de Jason Essary. Sin embargo, se sabe que empezó su carrera como luchador de vaqueros en Texas, donde se convirtió en campeón regional en la década de 1990. Posteriormente, se trasladó a México, donde cambió su nombre por el de " El Grande" y se convirtió en una estrella de la lucha libre enmascarada en la empresa AAA.
En 2006, fue contratado por la WWE y debutó como "The Gymini" junto con su hermano gemelo, Jake. Sin embargo, su carrera en la WWE fue breve y fueron liberados en 2007. Después de su liberación, luchó en circuitos independientes en los Estados Unidos, así como en Japón y Europa.
En 2013, Essary falleció trágicamente a los 40 años debido a una lesión cerebral traumática. Su muerte fue lamentada por la comunidad de lucha libre y se le recordó como un luchador talentoso y dedicado.
Jason y Tonya se conocieron en un bar de la ciudad. Tonya se acercó a la barra para pedir una bebida y Jason estaba allí, esperando a ser atendido. Ambos se sonrieron y comenzaron una conversación casual sobre la música que estaba sonando en el bar. Resultó que ambos eran fanáticos de la misma banda.
Después de un par de horas de conversación y risas, intercambiaron números de teléfono y acordaron encontrarse de nuevo. Desde entonces, han estado juntos, disfrutando de la música en vivo, la comida deliciosa y las aventuras al aire libre juntos.
Tonya Mitchell y Jason Essary se conocieron en una noche caliente de verano en un bar de la ciudad. Tonya estaba cantando en el escenario y Jason estaba sentado en la barra disfrutando de una cerveza. Después del espectáculo, Jason se acercó a felicitar a Tonya por su hermosa voz y talento. Tonya se sintió atraída por la personalidad amistosa y el estilo de vida vibrante de Jason, mientras que Jason se enamoró de la dulce sonrisa y la suave voz de Tonya. Desde esa noche mágica, Tonya y Jason comenzaron a salir y a explorar sus pasiones compartidas por la música y la vida en la ciudad. Con el tiempo, su amor floreció y se convirtió en un vínculo inquebrantable que los conduciría a través de los altibajos de la vida.