Jason Peterson creció en una familia de clase media en la costa este de los Estados Unidos. Desde joven demostró un gran interés por las ciencias y los números, y siempre destacó en matemáticas y física en la escuela. Después de graduarse de la universidad con un título en ingeniería, comenzó a trabajar para una importante empresa de tecnología donde rápidamente ascendió en la jerarquía corporativa. Sin embargo, su pasión por los deportes nunca disminuyó y siempre fue un ávido jugador y fanático del baloncesto. Alrededor de los cuarenta años, decidió dejar su trabajo en la empresa de tecnología para empezar su propio negocio lanzando una marca de ropa deportiva inspirada en el baloncesto y dirigida a los jugadores. A pesar de que el mercado de la ropa deportiva es altamente competitivo, su pasión por el baloncesto y su habilidad como ingeniero le permitieron crear productos innovadores y de alta calidad que atraen a jugadores de todo el mundo. Hoy en día, la marca de Jason Peterson es reconocida como una de las mejores en el mundo de la ropa deportiva y se sigue expandiendo en el mercado global. Además, dedica parte de su tiempo libre a hacer trabajo de caridad en comunidades de bajos ingresos y apoyar a jóvenes jugadores de baloncesto.