Joe Wade ha pasado gran parte de su vida en el mundo de los negocios. Es un hombre trabajador y dedicado, que ha conseguido tener éxito en su carrera profesional. Sin embargo, en los últimos años ha comenzado a cuestionarse el sentido de su vida y se ha dado cuenta de que no quiere pasar el resto de sus días trabajando como un robot sin sentir pasión por lo que hace. Por esta razón, ha comenzado a explorar su lado creativo y artístico, tratando de encontrar una forma de expresarse que le permita conectar con su verdadero yo. Ha empezado a pintar y escribir, y ha descubierto que estas actividades le proporcionan una gran satisfacción y le hacen sentir más vivo que nunca. A pesar de que esta nueva faceta de su vida ha supuesto un gran cambio, Joe se siente más feliz y realizado que nunca. Se da cuenta de que no hay límites para lo que puede lograr y está dispuesto a seguir explorando su alma en busca de nuevas formas de expresión.