Josephine King
Josephine King había pasado por muchas cosas en la vida, pero siempre había encontrado una manera de salir adelante. Había trabajado en varios empleos, desde camarera hasta consultora de negocios, pero su verdadera pasión era la música. Cada noche, después del trabajo, se sentaba en su piano y dejaba que las notas fluieran de sus dedos. Era su momento de paz y tranquilidad en medio del caos del mundo.
Siempre vivía sola, pero nunca se sintió sola. Tenía muchos amigos y amigas, y siempre estaba rodeada de gente. Y aunque disfrutaba de la compañía de los demás, también necesitaba su tiempo a solas para reflexionar sobre su vida y planificar su futuro.
Josephine era una persona reflexiva y madura, que había aprendido a valorar las cosas más importantes de la vida: la familia, la amistad y la felicidad. Había tenido muchas experiencias difíciles en el pasado que no le permitieron vivir plenamente en el presente, pero había aprendido a dejar ir el dolor del pasado y a seguir adelante.
Hoy en día, sigue tocando su piano todas las noches, rodeada de la música que tanto ama, y sabe que sea cual sea el futuro que le espere, siempre tendrá el poder de enfrentarlo y salir adelante.
