Katarzyna Gwizdala es una artista polaca nacida en 1988, conocida por su trabajo como pintora y muralista. Estudió en la Academy of Fine Arts en Cracovia, Polonia, donde se especializó en pintura. Su estilo es influenciado por la cultura pop, la naturaleza y la arquitectura. Ha creado murales y obras en todo el mundo, desde su ciudad natal en Polonia hasta México y Australia. En 2014, Gwizdala creó un mural para la ciudad de Cracovia que fue seleccionado como uno de los mejores murales del año por el Street Art Awards de Polonia. Además de su trabajo como artista, Gwizdala también ha trabajado como curadora de arte y diseñadora gráfica.
Katarzyna y Piotr se conocieron en una cafetería cerca del centro de la ciudad. Katarzyna estaba esperando a un amigo y Piotr estaba sentado en una mesa cercana con su computadora portátil. Después de unos minutos, Piotr se acercó y preguntó a Katarzyna si podía ayudarla con algo. Inmediatamente sintieron una conexión y comenzaron a hablar sobre todo tipo de cosas. Descubrieron que ambos estaban muy interesados en la música y la fotografía. Pasaron horas hablando y decidieron intercambiar números de teléfono. Ahora, se han convertido en grandes amigos y comparten su amor por la música y la fotografía juntos.
Piotr Adamczyk y Katarzyna Gwizdała se conocieron en una audición para una obra de teatro en Varsovia. Ambos llegaron tarde y se encontraron esperando su turno en la sala de espera. Piotr notó que Katarzyna estaba leyendo al mismo autor que él y empezaron una conversación sobre literatura. Descubrieron que compartían el amor por Shakespeare y desde entonces se volvieron inseparables. Después de la audición, Piotr le pidió el número de Katarzyna y la invitó a tomar un café. Ahí comenzó su historia juntos, ella se convirtió en su mayor apoyo y confidente, y así después de unos años de relación, se casaron.
Katarzyna y Jean-Manuel se conocieron en una exposición de arte contemporáneo en París. Ambos estaban admirando una obra de arte cuando sus miradas se cruzaron. Katarzyna ya había notado a Jean-Manuel antes, ya que lo había visto en varias ocasiones en eventos similares al que estaban asistiendo.
Jean-Manuel decidió acercarse a Katarzyna para hablar sobre la obra de arte que estaban contemplando. Al principio, hablaron sobre el significado detrás de la pieza, pero luego comenzaron a conversar sobre sus propios intereses en el arte y la cultura. Descubrieron que compartían una gran pasión por el arte moderno y por la creación de nuevas formas de expresión.
Después de un tiempo charlando, decidieron intercambiar sus números de teléfono y continuaron su conversación por mensaje de texto durante días. Finalmente quedaron para tomar un café juntos y juntos disfrutaron de una tarde de charla y risas.
Desde entonces, Katarzyna y Jean-Manuel se han convertido en grandes amigos y siguen asistiendo juntos a exposiciones y eventos artísticos en todo el mundo.