Como modelo de ropa interior, Katie Cordero rápidamente se convirtió en una de las figuras más reconocibles de la moda de la talla grande. Cordero comenzó a publicar fotos de cuerpo completo y selfies antes de que se volvieran comunes en Instagram, usando su cuenta para inspirar a otros para que se sintieran cómodos y hermosos en su propia piel. Sin embargo, la modelo y generadora de contenido no siempre se sintió tan segura en sí misma. Cordero creció rodeada de mensajes negativos sobre su peso y su apariencia, lo que la llevó a tener problemas y trastornos alimentarios. A través de su trabajo como modelo y su papel como influencer, Cordero ha hecho mucho para desafiar las nociones convencionales de la belleza y fomentar la positividad corporal en línea.