Kevin Mooney comenzó su carrera en el área de finanzas, pero después de varios años descubrió su verdadera pasión: la música. En su tiempo libre, Kevin toca la guitarra y escribe canciones originales que toca en pequeños bares y cafés locales. A medida que se adentraba más en la música, también comenzó a involucrarse en la producción musical y empezó a trabajar en un pequeño estudio en su casa.
Pero la pasión de Kevin no termina allí. También es un ávido corredor de maratón y ha participado en varias carreras en su ciudad natal. Además, es voluntario en una organización local que ayuda a niños desfavorecidos a través de la música.
Kevin es un hombre soltero y pasa gran parte de su tiempo libre con su familia y amigos cercanos. También es un entusiasta de la cocina y disfruta de experimentar con nuevas recetas y sabores. Aunque Kevin ha logrado mucho en su vida, todavía tiene grandes sueños y metas que espera alcanzar en el futuro.
Un día soleado, Leslie caminaba por las calles de Nueva York cuando se encontró con Kevin. Ambos se quedaron mirando por un momento, hasta que Leslie, con su voz suave, le preguntó si tenía fuego para encender su cigarrillo. Kevin, un poco nervioso, encontró su encendedor y lo ofreció. Fue entonces cuando se dieron cuenta de que ambos eran músicos y habían tocado en varios lugares de la ciudad. Comenzaron a hablar y a intercambiar historias, y se dieron cuenta de que sus intereses eran muy similares. Decidieron reunirse esa misma noche y tocar juntos algunas canciones, y desde allí nació una gran amistad y una colaboración musical que duraría muchos años.