Kevin O'Bannon nació en 1980 en San Luis, Missouri, Estados Unidos. Desde joven, siempre fue apasionado por el baloncesto y empezó a destacarse como jugador en su adolescencia. En su época de bachillerato, O'Bannon tuvo una destacada carrera en el equipo de baloncesto de su escuela, donde se ganó una beca deportiva para estudiar en la Universidad de Louisville en Kentucky.
Durante su época universitaria, O'Bannon se convirtió en un jugador muy importante en el equipo de baloncesto de la Universidad de Louisville. En su tercer año, en la temporada 2000-2001, O'Bannon lideró al equipo a la Final Four del campeonato de baloncesto universitario. A pesar de no haber ganado el campeonato, O'Bannon fue nombrado el Jugador Más Valioso de la región oeste del torneo.
Después de su carrera universitaria, O'Bannon intentó entrar en la liga profesional de baloncesto, la NBA. Sin embargo, no fue seleccionado en el draft de 2002 y decidió jugar en Europa en lugar de intentar volver a la NBA. Durante su carrera en Europa, O'Bannon jugó en varios equipos en países como España, Francia y Turquía.
Después de retirarse del baloncesto profesional en 2012, O'Bannon luchó por los derechos de los jugadores universitarios de baloncesto que no recibían compensación por el uso de sus imágenes y nombres en videojuegos y otros productos que generaban grandes ganancias para la NCAA. En 2009, O'Bannon demandó a la NCAA por el uso no autorizado de su imagen y nombre, lo que llevó a un histórico juicio que culminó en una sentencia a favor de O'Bannon y otros jugadores en 2014.
Actualmente, Kevin O'Bannon trabaja como entrenador y asesor deportivo. Es conocido por su activismo y defensa de los derechos de los jugadores universitarios de baloncesto.
Brittney y Kevin se conocieron en un café cerca del parque central de Nueva York. Los dos estaban en la cola para pedir café cuando sus manos accidentalmente chocaron mientras agarraban los endulzantes.
"¡Lo siento!" exclamó Brittney con una sonrisa amistosa.
"No te preocupes", respondió Kevin, también sonriente.
Luego de charlar un poco más, descubrieron que ambos vivían en el mismo edificio de apartamentos y eran fanáticos de la misma banda de música indie.
"¿Quieres ir al show de esta noche juntos?" preguntó Kevin.
Brittney asintió emocionada y luego de intercambiar números telefónicos, fueron juntos al concierto esa noche. Desde entonces, Brittney y Kevin se convirtieron en inseparables y comenzaron a salir.