Laura Gerard Leigh es una exmujer del príncipe Luis de Luxemburgo. Nació en 1985 en Namur, Bélgica, y es hija de un empresario belga y una madre de ascendencia irlandesa. Estudió en la Universidad de Lovaina y trabajó como relaciones públicas y modelo antes de casarse con el príncipe en 2006.
La pareja tuvo dos hijos, Gabriel y Noah, antes de su divorcio en 2017. Laura Gerard Leigh ha mantenido un perfil bajo desde entonces, aunque se ha reportado que ha seguido trabajando en el mundo de la moda y las relaciones públicas.
En los últimos años, ha sido vista en eventos sociales en Luxemburgo junto a su expareja y sus hijos, lo que sugiere que han logrado mantener una buena relación a pesar del fin de su matrimonio.
Era una tarde de verano en la costa de Florida cuando el Capitán Philip Kaye y Laura Gerard Leigh-Ex se conocieron. Ambos estaban disfrutando del sol y la playa en la misma zona del litoral. Fue en el momento en que una ola gigante les sorprendió y los arrastró hacia el mar. Afortunadamente, ambos eran buenos nadadores y lograron alcanzar la orilla sin problemas.
Después de esto, decidieron conocerse mejor y comenzaron a charlar sobre sus pasatiempos y gustos personales mientras tomaban algo fresco en una terraza cercana. Descubrieron que compartían una gran pasión por la navegación, y se prometieron organizar alguna excursión en barco juntos en un futuro no muy lejano.
A partir de este día, el Capitán Philip y Laura se hicieron muy buenos amigos, compartiendo muchas aventuras en el mar y secuenciando historias fascinantes sobre sus experiencias náuticas. De esta forma, su efímero encuentro se convirtió en un hermoso comienzo de una amistad que perdura hasta hoy día.
Prince Harry Windsor y Laura Gerard Leigh-Ex se conocieron en una fiesta en Nueva York. Él estaba allí por un evento de caridad y ella por trabajo. Se encontraron en la pista de baile y se sintieron atraídos el uno por el otro. Después de bailar toda la noche, intercambiaron números y comenzaron a salir juntos. Pronto descubrieron que tenían muchas cosas en común, incluyendo su amor por los perritos y su pasión por hacer una diferencia en el mundo. Después de varios meses de citas, Prince Harry le propuso matrimonio a Laura en la cima de una montaña en Colorado. Con lágrimas en los ojos, ella dijo que sí, y así comenzó su hermoso viaje juntos.