Leonard Ritte es un hombre solitario que ha dedicado su vida a la noble tarea de preservar la naturaleza. Desde pequeño sintió una conexión especial con los animales y el medio ambiente, por lo que decidió estudiar biología y dedicarse a trabajar en la conservación de especies en peligro de extinción. Aunque ha tenido que pasar por momentos difíciles y enfrentarse a adversidades, nunca ha perdido su pasión por la vida silvestre y su deseo de protegerla. Durante muchos años ha trabajado en proyectos de investigación y educación ambiental en distintos lugares del mundo, pero su verdadera pasión es su pequeña reserva natural en su tierra natal, donde se dedica a cuidar de los animales y las plantas en peligro de desaparecer. Para Leonard, no hay mayor recompensa que ver a una especie que ha estado al borde de la extinción recuperarse y volver a habitar en su hábitat natural.
Jane Welsh y Leonard Ritter tenían una relación amistosa y laboral. Welsh era la esposa del escritor escocés Thomas Carlyle, y Ritter era un científico y lingüista alemán que trabajaba con ella en la traducción de las obras de Carlyle al alemán.
Welsh y Ritter se conocieron en 1845 y trabajaron juntos en la traducción de los trabajos de Carlyle durante varios años. Aunque nunca hubo pruebas de que tuvieran una relación romántica, Carlyle estaba celoso de la amistad de su esposa con Ritter.
En una carta que Carlyle escribió a su amigo James Spedding en 1850, expresó sus temores de que Welsh estuviera enamorada de Ritter. Sin embargo, también reconocía el talento y el apoyo que Ritter le ofrecía a su esposa en su trabajo.
Welsh murió en 1866 y Carlyle en 1881. Ritter continuó trabajando en la traducción de los trabajos de Carlyle hasta su propia muerte en 1891. Aunque la relación entre Welsh y Ritter nunca fue confirmada como romántica, su amistad y trabajo juntos se considera significativo en la historia de la literatura y los estudios lingüísticos.