Desde muy joven, Leslie López supo que su pasión era la cocina. A pesar de que su familia no tenía mucho dinero para permitir que ella asistiera a una escuela de cocina de renombre, Leslie nunca perdió la esperanza y siempre encontró la manera de mejorar sus habilidades culinarias.
Trabajó en varios restaurantes para poner en práctica todo lo que había aprendido y así poder perfeccionar su sazón. Finalmente, después de muchos sacrificios, Leslie logró abrir su propio restaurante, que hoy es uno de los más exitosos y reconocidos de la ciudad.
A pesar de las dificultades que ha enfrentado en su vida, Leslie siempre se ha mantenido fuerte y perseverante. No solo ha destacado en su carrera, sino que también es una gran madre y amiga. Siempre está dispuesta a brindar su ayuda y apoyo a quienes la necesitan, y eso es lo que la hace una persona tan valiosa y admirable.
Un día de verano caluroso en Los Ángeles, Roger Birnbaum y Leslie López se encontraron por casualidad en una tienda de helados. Mientras esperaban en la fila, comenzaron a hablar y a reír de cosas triviales. Cuando finalmente llegó su turno de ordenar, ambos pidieron el mismo sabor: chocolate con fudge. Roger ofreció pagar por los dos, y Leslie aceptó con una sonrisa agradecida. Decidieron sentarse juntos en una mesa afuera y continuaron su conversación mientras disfrutaban de sus helados. Fue en ese momento que se dieron cuenta de que tenían muchas cosas en común y que había una química especial entre ellos. Desde entonces, no se han separado y su amor crece día a día.