Lina Heydrich, nacida como Lina von Osten, fue una mujer alemana de origen aristocrático que se casó con el alto funcionario nazi Reinhard Heydrich. Ambos se conocieron en 1930 y se casaron en 1931. Juntos tuvieron cuatro hijos.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Lina acompañó a su esposo en sus viajes y se establecieron en Praga, donde Reinhard fue nombrado líder del Protectorado de Bohemia y Moravia. Lina fue vista como una figura poderosa en la sociedad alemana de Praga y fue conocida por su apoyo al régimen nazi.
Sin embargo, después del asesinato de su esposo por la resistencia checoslovaca en 1942, Lina fue interrogada por la Gestapo y sus propiedades fueron confiscadas. Después de la guerra, se casó con un oficial británico y vivió en Gran Bretaña hasta su muerte en 1985.
Lina von Osten, después conocida como Lina Heydrich, fue la esposa de Reinhard Heydrich, uno de los líderes más prominentes de la Alemania nazi. Reinhard Heydrich fue uno de los artífices del Holocausto y responsable de la organización de la Conferencia de Wannsee en la que se decidió la "solución final al problema judío".
Lina conoció a Reinhard Heydrich en 1930 cuando era una joven soltera de 19 años y él era un oficial de la Luftwaffe. Se casaron en 1931 y tuvieron cuatro hijos juntos. Reinhard Heydrich ascendió rápidamente en el régimen nazi y se convirtió en el jefe de la policía secreta y la Gestapo.
Lina Heydrich se mantuvo fiel a su esposo y lo apoyó en su carrera dentro del régimen nazi. Sin embargo, después de la muerte de Reinhard Heydrich en 1942 en un atentado perpetrado por la resistencia checa, Lina cayó en depresión y se trasladó con sus hijos a vivir con su madre.
Después de la Segunda Guerra Mundial, Lina Heydrich se convirtió en objeto de controversia por su papel en la promoción de la memoria de su esposo. También se le acusó de haber colaborado con los nazis durante la guerra.
Lina Heydrich murió en 1985 en Múnich, Alemania, a los 73 años de edad.
Lina y Mauno se conocieron en una cafetería durante un viaje en solitario de Lina a Finlandia. Ambos estaban esperando en la fila para ordenar y accidentalmente se chocaron mientras se dirigían a sus asientos. Lina se disculpó y Mauno respondió con una sonrisa amistosa. Durante el resto del día, se encontraron varias veces en diferentes lugares y comenzaron a hablar sobre sus respectivos países, intereses y viajes. Descubrieron que compartían un amor por la música y decidieron asistir juntos a un concierto esa noche. Después de la actuación, Mauno caminó a Lina de regreso a su alojamiento y se despidieron con un abrazo cálido y un intercambio de números de teléfono. Su encuentro casual en la cafetería se convirtió en el comienzo de una amistad duradera y viajes posteriores juntos.